La semana de la tele
Las estrellas estrelladas de TVE: Sardá, Milá y ahora Intxaurrondo
Al tiempo, La 1 negocia con otro gran nombre, David Broncano, para hacer frente a El Hormiguero de Pablo Motos
La apuesta por El mejor de la historia le ha salido rana a TVE. Al quinto programa, ha sido expulsado del prime time. Lo mismo le había ocurrido a la pública recientemente con Mercedes Milá y, en 2022, con Javier Sardà. Tres sonoros batacazos. Además, el regreso de Julia Otero a la televisión pública, también en 2023, estuvo más cerca del fracaso que del éxito, si bien no es un tropiezo tan grande como los citados. Y por el horizonte asoma otra estrella, David Broncano, al que la cadena pública estudia ofrecer un contrato megamillonario para ponerlo a competir con Pablo Motos y sus tertulianos, que trabajan en el programa de más éxito de la televisión española y uno de los más críticos con el Gobierno de Sánchez.
El pasado viernes, La 1 decidió expulsar del prime time la quinta y penúltima entrega de El mejor de la historia, el programa presentado por ahora Intxaurrondo. La decisión se tomó porque el cuarto capítulo se hundió hasta el 3,3 % de cuota de pantalla, por debajo incluso de La 2, que marcó un 3,7 % esa misma jornada. Números bochornosos para un programa por el que ya solo la presentadora cobra 25.000 euros por noche trabajada. Acertó la dirección de la cadena, pues la película emitida en sustitución del programa de marras (El tesoro del Amazonas) tuvo tres veces más seguimiento (9,6 %). El mejor de la historia hizo en su debut en el horario late night un 5,3 % de cuota de pantalla y solo reunió a 344.000 espectadores. En su estreno había hecho un 6,8 % y los dos siguientes episodios se quedaron en el 5,1 %.
El fracaso de Intxaurrondo llega después del de Mercedes Milá. La catalana —quien por cierto la montó en el primer programa de El mejor de la historia—regresó a TVE con un programa que pretendía hacer comprender a los jóvenes la historia más reciente de España. Para ello, se recuperaban algunas entrevistas antiguas hechas por Milá (algo nada original: ya había hecho lo mismo en Movistar Plus +), a quien escudaba en las labores de presentación la microfonada grupi de Pedro Sánchez en los Goya, Inés Hernand. El programa se tituló No sé de qué me hablas y muchos de ustedes no sabrá, en efecto, de qué les hablo, pues su seguimiento fue mínimo. TVE lo movió por la parrilla, como siempre pasa con los formatos fracasados: del access del jueves lo pasó al late night del miércoles. El caso es que tuvo un 8 % de share medio y una media de 843.000 espectadores en sus ocho episodios. Solo en su estreno superó el millón de seguidores. El día de su adiós —el 7 de febrero— solo reunió a 556.000 televidentes aunque contaba con el plato fuerte de contar con Pedro Almodóvar en vivo y en directo. Todo indica que no habrá más temporadas de No sé de qué me hablas.
Por supuesto, tampoco las habrá de la La gran confusión, el espacio que supuso el regreso a la cadena pública de Javier Sardà en 2022. En su estreno, captó el interés de 912.000 espectadores (9,1 % de share). A partir de la quinta entrega se empezó a emitir de madrugada. Los diez (fracasados) programas de La gran confusión costaron 1.819.363 euros.
La misma cadena pública gastó 5,5 millones de euros (423.000 euros por cada programa) para la realización de trece entregas de Días de tele, presentado por Julia Otero y que se emitió entre enero y mayo del pasado año. La presidenta de la corporación RTVE, Elena Sánchez, lo englobó dentro de las «apuestas» del grupo que resultaron «fallidas». Su audiencia media fue de un 8 %.
Nada menos que un contrato de tres años a razón de 87.000 euros por programa es la oferta que, según han publicado varios medios, hizo La 1 a David Broncano. El objetivo es hacerlo competir con Pablo Motos, aunque el tipo de programa que hace Broncano en Movistar está lejos de ser para un público familiar, y no solo lo decimos por su famosa pregunta sobre sexo sino también por las constantes y jocosas menciones a las drogas. La contratación se iba a aprobar esta semana, pero el Consejo de Administración de RTVE ha dicho por ahora que no, si bien puede tomar la decisión contraria en los próximos días.