Televisión
El otro duelo televisivo de la temporada: ¿Ana Rosa Quintana o Sonsoles Ónega?
TardeAR, más periodismo: Y ahora, Sonsoles, más folklore
Había expectación por ver qué novedades ofrecían en su vuelta a la pantalla, Ana Rosa Quintana en TardeAR y Sonsoles Ónega en Y ahora, Sonsoles. El fallecimiento repentino de Caritina Goyanes, volteó sus escaletas y permitió ver el músculo informativo en directo.
Y ahora Sonsoles, con media hora más de programa, fue seguida por 801.000 espectadores, un 11,5 % de share(¿sin publicidad?). TardeAR, se quedó a 62.000 espectadores con un 10,8%. El horario de coincidencia de los dos programas, de 17:30 a 19:50, fue más ajustado 11,4% Sonsoles y 10,7% Ana Rosa. Es la frialdad y realidad de los datos, pero… ¿el contenido?
Ana Rosa dio la noticia de la fulminante muerte de Caritina Goyanes, con tanta rapidez que Lolita Flores que estaba en el plató de colaboradora, tuvo que ausentarse por un ataque de ansiedad. Y ahora, Sonsoles, desarrolló mejor la noticia, con más opiniones y un directo con el tanatorio donde se visionó una corona en la que se leía «De tu madre, tu esposo y tus hijos». La colaboradora Pilar Vidal añadió una pincelada innecesaria: aprovechó el momento para explicar que «el marido de la fallecida, tenía un hijo extramatrimonial y que iban a reconocerlo los dos». Salida de tiesto absoluta.
Y ahora Sonsoles lanzó el programa durante casi veinte minutos con el culo al aire de Carlos Maturana, pareja de Lara Dibildos, en el mar. Los comentarios sobran. Y, lógicamente, para captar espectadores, repitieron las imágenes al final del espacio. Un comienzo poco agradable como se encargó de advertir el colaborador Antonio Naranjo y muy morboso, lo que permitió al resto decir tonterías sobre el culo de Maturana durante muchos minutos.
Ana Rosa se centró en la truculenta historia de la Galdeano, su hija Sofía y su novio Kiko, para comenzar. Tema recurrente en Telecinco. Anunció la muerte de Caritina, comentaron la sentencia que le puede caer a Daniel Sancho, en el pack de sucesos que prepara Manuel Marlaska y entrevistó en directo a María Corina Machado, vencedora de las elecciones en Venezuela y perseguida por el dictador Maduro. Ana Rosa se presentó así: «Me pongo de rodillas ante usted porque es una mujer libre y valiente». Desde un lugar secreto, Corina le dijo: «a un mes de las elecciones el pueblo venezolano sigue clamando justicia». Son momentos de la tarde en los que desaparece el lagrimeo, los sucesos, lo rosa y aparece el periodismo con mayúsculas.
Mientras en la competencia desarrollaban una larga entrevista con María José Suarez, ex de Álvaro Muñoz Escassi que ¡hablaba por primera vez, dijeron, de su ruptura! Se explaya, lógicamente, porque Ónega la ha fichado de colaboradora del programa. Era el peaje para comenzar su colaboración.
Ana Rosa cerró su primera tarde con el reencuentro con Jorge Javier Vázquez. El presentador de El diario de Jorge aprovechó para tirarle algunos dardos que Ana Rosa toreó con maestría y Vázquez le espetó: «Ana Rosa, deja en paz a Pedro Sánchez. Va a continuar ahí. Te pasa con él como a mí con Ayuso, que no la soporto». Ana Rosa saltó a la yugular del nuevo fan del presidente: «A mí Pedro Sánchez me da igual, lo que no me gusta es lo que está haciendo con ERC y con Bildu… Con tal de mantenerse en la Moncloa». Y terminó con una frase lapidaria: «A Ayuso sí le ha votado la mayoría, a Pedro Sánchez no».
Primeros días de reentré y la conclusión es: Ana Rosa Quintana 1 Sonsoles Ónega 0. El contenido del programa Y ahora, Sonsoles, es más pachanguero en excesivos minutos, superficial. TardeAR entra en ese mundo de lo folclórico, pero sabe dar más pinceladas serias, interesantes.
La audiencia la gana Y ahora, Sonsoles, por duración, arrastre y poca publicidad. En esta faceta Onega 1 Quintana 0, pero es una carrera muy larga. Habrá sorpresas.