Dan por muerta a la compositora Lydia Tár, a la que da vida Cate Blanchett, cuando en realidad no existe
La cuenta de Twitter de la supuesta compositora alemana a la que ha dado vida Cate Blanchett ha anunciado esta mañana el fallecimiento después de trastabillar por la escaleras del Teatro Dolby de Hollywood en la gala de los Premios Oscar
«Es con gran pesar que compartimos que Lydia Tár, directora y compositora de renombre mundial, murió anoche después de caerse por las escaleras del Teatro Dolby», ha anunciado, con gran pesar, la cuenta de Twitter de la artista, que ha fallecido a los 54 años. El suceso, que se ha producido un día después de la celebración de los Premios Oscar, ha «conmocionado» a todos sus fervientes seguidores.
La película Tár, dirigida por Todd Field y protagonizada por una deslumbrante Cate Blanchett, dio a conocer a la enigmática directora alemana. La cinta relata la increíble historia de Lydia Tár, su auge y su caída dentro del mundo de la música clásica y los escándalos sexuales que envuelven su pasado.
Aunque el film no se llevó ninguna estatuilla en la fiesta del cine, sí que estuvo nominado a seis galardones, entre ellos a Mejor Actriz y Mejor Película. Además, ha puesto en el mapa el nombre de Lydia Tár y su increíble vida... demasiado increíble para ser cierta.
Una historia totalmente detallada y plausible sobre el mundo de la dirección de música que, junto a una gran estrategia de marketing y una campaña de promoción de la película, ha hecho creer a muchos espectadores que la película era un biopic. Sin embargo, la película sí que cuenta con su dosis de realidad y muchas anécdotas que el mismo director vivió.
Entonces, ¿ha muerto Lydia Tár?
La respuesta rápida: no, no ha muerto. Principalmente porque Lydia Tár ni siquiera existe, es un personaje ficticio cuya vida se acomoda perfectamente al relato predominante de la película. Una narrativa que versaba sobre la cultura de la cancelación, los supuestos escándalos sexuales que se han dado en el ámbito de la música clásica y una mujer exitosa y homosexual en un alto cargo dentro de un mundo de hombres.
El anuncio en Twitter de la supuesta cuenta oficial no es otra cosa que una broma que se alarga en el tiempo, ya que narró su llegada a la ceremonia de los Oscar, relató su caída y hoy ha hecho un pequeño obituario sobre su propia muerte. El personaje cuenta incluso con una página web de la artista, donde vende libros sobre la vida de la directora. Sin duda, una broma que pone a prueba la capacidad de captar la ironía y de indagar de periodistas y lectores.