Fundado en 1910

Beato de Liébana: códice de Fernando I y Dña. Sancha

Ilustrado y regio: el 'Beato de Liébana' centraliza la nueva exposición de la Biblioteca Nacional

Encargado por los Reyes Fernando I y Doña Sancha, esta edición de la obra de Beato de Liébana es una de las más importantes en todo el mundo, debido a su escasez y gran riqueza pictórica

La Antesala del Salón de Lectura María Moliner de la Biblioteca Nacional de España estrena su nueva exposición, «Beato de Liébana. La fortuna del Códice de Fernando I y Sancha», abierta desde el 16 de marzo hasta el 27 de agosto.

Los 'Beatos' son una serie de manuscritos ilustrados que contienen la obra de Beato de Liébana (Liébana, c. 730 – Liébana, c. 798), famoso en la Edad Media por sus Comentarios al Apocalipsis, de gran interés para comprender el último libro de la Biblia.

Estos representan una riqueza inconmensurable, pues tan solo se conservan cuarenta ejemplares medievales, siendo el expuesto en la Biblioteca Nacional el más importante de todos debido a su promoción regia.

Los Reyes Fernando I de León (Navarra, c. 1016 – León, 1065) y Doña Sancha de León (León, c. 1018 – León, 1067) fueron los que ordenaron la nueva creación del manuscrito. Para ello, los mejores ilustradores de la época, los monjes, trabajaron en ello. Se conoce que estos monarcas son los que encargaron la obra debido a que sus nombres aparecen en dos páginas.

Una oportunidad única

La Biblioteca Nacional asegura que este es uno de sus ejemplares más valiosos dentro de su colección, de la cual forma parte desde los orígenes de su fundación: en 1711 se creó, por orden del Rey Felipe V, la Real Biblioteca, que más tarde se convertirá en la Biblioteca Nacional.

La institución, que suele dar un protagonismo especial a los códices medievales, busca que el público se adentre en la vida y producción de una de las obras artísticas más fascinantes de la Alta Edad Media.

La historia del manuscrito del Beato de Fernando I y Sancha comienza su historia en el scriptorium regio de León, con el objetivo de pasara a formar parte del monasterio de San Juan Bautista de León (actual San Isidoro de León).

Durante la Guerra Civil española (1936 – 1939) viajó fuera de España para su protección. Terminado el conflicto, la obra regresó. Pasados los años, en 2015, estos manuscritos obtuvieron su debido reconocimiento: la UNESCO incluyó los Beatos conservados en España y Portugal en el registro de la Memoria del Mundo.