La nueva directora del Teatro de la Zarzuela propone una agenda «marcada por la igualdad de género»
'Mujer' e 'inclusividad' se encuentran también entre los objetivos que perseguirá Isamay Benavente, después de ser elegida por el Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música
Joan Francesc Marco, director general del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música (INAEM), anunció este miércoles quién sería el próximo director del Teatro de la Zarzuela, que ha resultado ser una mujer: Isamay Benavente. Esta se incorporará al cargo a partir de noviembre de 2023 y su duración será de cinco años.
Obsesión por el género
Lo primero que se ha valorado es el hecho de que ella fuera «la primera mujer en dirigir el Teatro de la Zarzuela desde su inauguración en 1856», según ha valorado Marco.
El director general también ha destacado «la contrastada labor de gestión cultural de Benavente en su trayectoria como directora artística del Teatro Villamarta y del Festival de Jerez, así como su estrecha vinculación con la música española y la danza a lo largo de su carrera».
Se presentaron un total de 26 candidaturas, de las cuales indica el Ministerio de Cultura y Deporte que «el 24 % correspondían a proyectos liderados por mujeres».
De acuerdo con el estatuto del Teatro de la Zarzuela, las propuestas deben estar acompañadas de un proyecto integral de gestión para el coliseo, que posteriormente pasarán a configurar el plan director, que señala las líneas generales de actuación del teatro.
La valoración estuvo a cargo del Consejo Artístico de la Música, el cual seleccionó un número muy reducido de candidaturas. Durante la siguiente prueba, los candidatos restantes se entrevistaron con el director general, acompañado por la subdirectora general de Música y Danza, Ana Faus, y una selección de asesores de reconocido prestigio en el campo lírico y escénico.
La danza española, inclusiva e igualitaria
Marco ha valorado el proyecto presentado por Isamay Benavente como «una propuesta que pretende impulsar el teatro lírico patrimonial en los ámbitos nacional, europeo y latinoamericano», que da continuidad a la labor emprendida por su antecesor, Daniel Bianco.
Entre sus líneas estratégicas está potenciar la singularidad y liderazgo del Teatro de la Zarzuela como espacio de encuentro y referencia para la lírica y la danza españolas; reafirmar el compromiso con la nueva creación y los jóvenes talentos; y seguir trabajando en el desarrollo de La Zarzuela como un teatro público, inclusivo y comprometido con la igualdad de género a través de una gestión transparente y sostenible.
«Como suele suceder en estos casos, todavía me estoy recuperando de la sorpresa», cuenta la propia Benavente. «Para mí este voto de confianza supone una alegría inmensa pero sobre todo una gran responsabilidad, pues estamos hablando de una institución de referencia mundial, cargada de historia y momentos inolvidables», concluye.