
Imagen de 'Drácula de Bram Stoker', película de Francis Ford Coppola
¿Es 'Drácula', de Bram Stoker, la mejor novela «desconocida» de la historia?
La posterior fama del personaje, el noble empalador en el que se inspiró y el vampiro popular para todos los gustos y públicos en que se convirtió, se debe a esta obra fundamental de la literatura
Un día como hoy de 1897 se publicaba Drácula. Bram Stoker, matemático, abogado, crítico de arte y de teatro, amigo íntimo de Oscar Wilde (con cuya antigua novia se casó), niño enfermo y posteriormente héroe del atletismo, todas estas cosas que son casi todas las cosas y algunas más hicieron posible la novela que escribió bajo los efectos de una depresión que le transportó a las historias de terror que le contaba su madre de niño. Si la verdadera patria es la infancia, como decía Rilke, el «patriotismo» del autor irlandés le sacó del abismo a través de una obra monumental tejida inevitablemente con los rasgos de su propia vida junto a los del más allá: el geográfico, el mitológico y el esotérico en una composición virtuosa.

Bram Stoker
Todo el mundo conoce a Drácula. Los niños de los ochenta creían que era el de Barrio Sésamo: una muestra de la dimensión del personaje que fue mutando en el imaginario para darle mayor importancia a su origen, al libro, que contradictoriamente se fue ocultando bajo toda esa maleza popular que llevó al personaje por derroteros tópicos, alejando la profundidad y la riqueza absoluta del relato creador y original. Un texto y una historia sin par, inauguradores de la novela de terror gótica. El cuento de amor, de aventura, de miedo (y de los miedos humanos) o de suspense en un elenco temático casi irreductible, abierto y universal como su propio mito.
Novela epistolar
La leyenda que se sostiene en un simbolismo inacabable que refleja la existencia humana y se adentra incluso en su después, con el poder inmortal de Dios y el otro poder inmortal de Drácula, el bien y el mal, pero sin polarizar, ahí expuesto, con sus enormes y diminutos matices en el marco de la sociedad victoriana donde vivía el autor, que en el momento de escribir su gran obra se hallaba en un estado de alejamiento absoluto de ella y de su mundanidad debido al precipicio al que se asomaba su alma. Una sociedad observada desde un más allá a través del caleidoscopio de un caletre riquísimo y en ese momento traumatizado.

Primera edición de 'Drácula'