Verano nefasto en el Coliseo: los romanos protestan por las tres acciones vandálicas contra el monumento
Tres turistas de diferentes procedencias han sido denunciados en el último mes por realizar inscripciones en las paredes del anfiteatro, un delito duramente castigado pero que continúa siendo habitual
Los actos de vandalismo efectuados en el Coliseo ya ascienden a tres en lo que va de verano. Pese a que en 2020 se instituyeron multas de entre 20.000 y 60.000 euros, así como otros castigos para cualquier acción que altere o deteriore el monumento, esta clase de acciones siguen siendo bastante frecuentes.
El primero de estos incidentes se produjo el 23 de junio, cuando dos jóvenes residentes en Inglaterra escribieron las palabras «Ivan + Haley 23» con una llave en uno de los muros del anfiteatro, siendo denunciados por el Parque Arqueológico del Coliseo. Gracias a un vídeo del acto vandálico que otro visitante grabó y difundió posteriormente en internet, fueron identificados y multados por las autoridades italianas.
El autor de la pintada, Ivan Dimitrov, de 27 años, envió posteriormente una carta a la Fiscalía de Roma y al ayuntamiento de la ciudad, disculpándose por su acción y afirmando que desconocía el valor histórico del monumento. Ahora, tanto él como su pareja se enfrentan a una posible pena de entre dos y cinco años de prisión, así como a una multa de hasta 15.000 euros y la prohibición de acceder al Coliseo. No obstante, todavía no ha trascendido si existe un procedimiento judicial abierto.
Apenas un mes más tarde, el 16 de julio, una adolescente suiza de 17 años fue captada en vídeo por un guía turístico grabando la letra «N», acción por la que podría pasar varios días en prisión, además de ser obligada a pagar 15.000 euros de multa. La misma semana, otro turista de la misma edad, en este caso alemán, fue descubierto escribiendo en un muro del piso inferior durante una visita realizada con sus profesores y compañeros de clase.
Los directivos del Parque Arqueológico han indicado que, si bien la seguridad del monumento ha demostrado su eficacia, la gran afluencia de turistas en época de verano hace más difícil detectar los casos de vandalismo. Con el fin de paliarlo, en junio se reforzaron las medidas de vigilancia, estableciendo a un mayor número de policías y patrullas en los alrededores.
Manifestaciones y protestas
Por otra parte, y si bien el gobierno del país ha aprobado una reforma encaminada a agilizar los trámites de las multas, la gran cantidad de atenuantes posibles y la condición de turistas de la mayoría de detenidos hacen que la práctica totalidad de las mismas queden sin cobrar.
Por eso mismo, grupos de italianos han organizado protestas y manifestaciones en la ciudad, en las que piden que se regularice no sólo el turismo, uno de los grandes problemas de Italia en general y Roma en particular –aunque también una de sus principales fuentes de ingresos–, sino el acceso a los monumentos históricos.
Además de las protestas desde Patrimonio Nacional Italiano, que ve en estos actos de vandalismo un ataque directo a la historia y la cultura del país (incluso de Europa), las autoridades antimonopolio han abierto una investigación sobre las operaciones de venta de entradas con sobreprecio para los turistas que desean visitar el antiguo Coliseo de Roma, la atracción más visitada del país europeo.