Jordan B. Peterson, de psicólogo azote de la izquierda a divulgador cristiano tras abrazar la fe
«Me complace anunciar mi nueva gira para 2024: 'We who wrestle with God' ('Nosotros que luchamos con Dios')». Así ha anunciado el psicólogo clínico y «azote de la ideología woke» Jordan B. Peterson su nuevo tour de charlas, conferencias y encuentros, que se alargarán durante todo el año y le llevarán a recorrer, de momento, todo Estados Unidos entre el 4 de febrero y el 11 de junio.
A continuación, en su vídeo de promoción cita un capítulo del Génesis; en concreto, el capítulo 3, versículos 11-13: «Él replicó: '¿Quién te ha hecho ver que estabas desnudo? ¿Has comido acaso del árbol del que te prohibí comer?'. Dijo el hombre: 'La mujer que me diste por compañera me dio del árbol y comí'. Dijo, pues, Yahveh a la mujer: '¿Por qué lo has hecho?'. Y contestó la mujer: 'La serpiente me sedujo, y comí'».
«Me voy a concentrar en las ideas que he trabajado para mi próximo libro We who wrestle with God (Nosotros que luchamos con Dios)», explica Jordan Peterson, que se remonta a sus lecciones sobre la Biblia, en las que indaga en las explicaciones psicológicas que contienen libros como el Éxodo o el Génesis. Entre ellas hay prédicas tituladas «Dios y la jerarquía de la autoridad» o «Adán y Eva - La consciencia, el mal y la muerte», algunas de las cuales alcanzan los cuatro millones de visualizaciones.
«Me concentraré en temas bíblicos y en cuestiones de narrativa general, pero todo lo que diga tendrá una aplicación más amplia y genérica», continúa, algo misterioso. Lo cierto es que mientras la «cultura de la cancelación» intenta expulsar a Dios de la esfera pública, Jordan Peterson y su mujer, Tammy, tratan de situar el tema en el centro de la conversación en un mundo cada vez más secular.
Un camino de fe
Tanto Jordan Peterson como su mujer han luchado con las cuestiones de la fe y están labrando sus propios caminos hacia la verdad y la comprensión. De hecho, Tammy ha hablado públicamente sobre su camino de conversión católica. Por su parte, tendremos que esperar a que el renombrado psicólogo y azote de la ideología woke comience sus charlas o publique su libro para conocer hasta qué punto ha emprendido un camino de fe.
«Recorro varias de las principales historias bíblicas, tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento, y hago un comentario sobre su significado psicológico, práctico, social y posiblemente filosófico y teológico. Es una explicación de, por ejemplo, lo que significa vivir en una relación de establecida por una promesa», ha expresado al explicar esta próxima publicación.
Sin embargo, cuando le preguntan abiertamente por su religiosidad, él invita a que compren su libro o acudan a sus conferencias (por supuesto): «¿No dicen que 'por sus frutos los conoceréis'?». Uno de esos frutos ha sido, según él, su largo matrimonio de 35 años, que capeó las tormentas de la enfermedad terminal de su mujer y la atención de los medios, particularmente desde que Jordan Peterson saltó a la fama al luchar contra la ideología de género como profesor en la Universidad de Toronto. «Se contrae matrimonio como un acto de fe. Te enamoras de alguien, lo cual es una gracia, un regalo de Dios en un sentido real», explica Jordan Peterson en un video de DailyWire+.
Los Peterson fueron invitados por su amiga, Queenie Yu, numeraria del Opus Dei y directora de Educación del Carácter de la Escuela para Niñas de Hawthorn, a hablar en un evento en el Kintore College de Toronto con estudiantes, padres y estudiantes de Hawthorn. Allí, Tammy Peterson confirmó de nuevo que sería bautizada en el rito católico en Semana Santa, algo para lo que preparaba «con espíritu fervoroso».
Una carrera a contracorriente
Peterson, profesor emérito de la Universidad de Toronto, es autor de tres libros: Beyond Order, 12 Rules for Life y Maps of Meaning, y colabora con el grupo de comunicación conservador The Daily Wire.
Pero es igualmente conocido por sus podcasts y declaraciones controvertidas en las redes sociales. Saltó a la fama después de impugnar una ley canadiense que, según él, criminalizaría el uso de pronombres incorrectos para una persona transgénero, y fue suspendido temporalmente de Twitter por una publicación sobre un actor transgénero.
A pesar de esto, ha acumulado un gran número de seguidores, en su mayoría jóvenes que aprecian sus «reglas de vida» y de sentido común, sus puntos de vista conservadores y lo que algunos llaman su «estilo Don Draper».