El trágico día que Marvin Gaye asesinó a Marvin Gaye

Todavía no había cumplido los 45. Le faltaban horas, pero Marvin Gaye, el mítico cantante de soul, no los alcanzó. Hacía apenas un año que había recibido el Grammy por Sexual Healing. Pero esa escena de éxito era en realidad un grueso telón que ocultaba un caos vital entre bambalinas.

Su padre era un predicador radical y con frecuencia violento. En su iglesia de Washington empezó a cantar el pequeño Marvin y ya no paró de hacerlo. El buen atleta tuvo que dejar el deporte por la incomprensión paterna y se sumergió en la música como necesidad para su vida exterior e interior.

Dúo con Tammi Terrell

Después de unos comienzos sin éxito en distintos grupos, su contacto con la legendaria discográfica Motown (se casó con la hermana del propietario original) significó su lanzamiento definitivo. Primero como acompañante y después como solista. Su dúo con Tammi Terrell le llevó al estrellato, hasta que en 1967 ella sufrió un desmayo por un tumor cerebral que acabó con la pareja artística y con su vida tres años después.

Gaye, de exacerbada sensibilidad, dijo que después de aquello él había muerto de alguna manera. Y fue cierto. El triunfo absoluto de sus posteriores estrenos ocultaron su derrumbe personal. Su íntima infancia desgraciada apareció de repente en la edad adulta del gran artista.

Los 70 fueron los tiempos de What's Going On y la formación casi completa del mito, también del principio de sus problemas más allá del alma. El divorcio y el primer fracaso comercial encendieron las alarmas. Apareció la depresión. También los problemas financieros.

Gaye era un Mozart del soul acuciado por las deudas, los impuestos y la sombra del padre terrible. Sexual Healing palió aquel sufrimiento solo para la galería, un espacio abierto donde también estaba la cocaína.

Nada parecía indicar una realidad desoladora en medio de la gloria musical que se manifestó de pronto y de forma impensable, casi como si fuera un destino ineludible. Gaye había ganado dos premios Grammy, pero se marchó a vivir a casa de sus padres debido a su depresión crónica, aumentada por el consumo de drogas.

Durante aquel tiempo Marvin Gaye quiso suicidarse en varias ocasiones, y casi puede decirse que lo consiguió. Las peleas constantes con su padre tuvieron su apogeo la víspera de su cumpleaños. Se vengó de la violencia de su padre con más violencia y aquella noche este no lo soportó y le disparó dos veces con una escopeta. Marvin Gaye falleció una hora más tarde en el hospital. Le había matado un hombre que también se llamaba Marvin Gaye.