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La nueva normativa pretende expandir la Ley del Libro al entorno digital

La descarga ilegal de libros ilegales se ha disparado en España

En España se piratean más libros que nunca, y es un problema menos malo de lo que parece

Los datos de pirateo digital de libros y otros productos culturales es preocupante, pero tiene también una lectura esperanzadora

Se hacía eco hace unos días El Debate de la noticia difundida por el Observatorio de la piratería y hábitos de consumo de contenidos digitales 2023 según la cual la piratería digital en España experimentó el pasado año un importante incremento hasta alcanzar la cifra de 33.957 millones de euros defraudados. Ese incremento supone un aumento del 5 % de lo defraudado respecto al año 2022.

Lejos de tratarse de números abstractos, las cifras encierran pérdidas monetarias directas a los creadores, artistas, escritores y músicos por valor de 1.992 millones de euros, además de suponer un lastre para la creación de 107.410 puestos de trabajo directos e indirectos en el sector de la cultura.

Aunque el sector de la música es el que mayor dinero defraudado ha registrado, es el del libro el que registró un mayor número de consumidores piratas.

Según dicho informe, el 37 % de los españoles ha descargado de forma ilegal algún libro digital a lo largo del año 2023, lo que supone un 4 % más que en 2022.

El observatorio concluye que una importante mayoría de los consumidores de cultura que recurren a descargas ilegales, el 61 %, lo justifica con el argumento de que no quieren pagar por un producto que luego tal vez no les guste.

También se argumenta que los contenidos piratas permiten un acceso «rápido y sencillo» o, incluso, se esgrime ignorancia: «No pasa nada, todo el mundo lo hace».

A la cabeza de lectura

Con todo, más allá de lo lamentable de la situación y del perjuicio a los creadores y trabajadores del sector de la cultura, estos datos reflejan también un dato esperanzador sobre los hábitos de consumo de cultura y de consumo de lectura.

Tan sencillo como una regla de tres: si en España se piratean libros es porque se lee, lo que, al final, redunda también en la compra de libros.

Los datos del Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros en España 2023, publicado el pasado mes de febrero, apunta a que en 2023 el porcentaje de población mayor de 14 años que leyó libros alcanzó el 68,3 %.

En concreto, apunta el Barómetro, los jóvenes siguen siendo los que más leen. Un 74 % de los jóvenes entre 14 y 24 años, señala el Barómetro, son lectores habituales. El porcentaje se reduce, aunque sigue siendo un buen dato, al 65,8 % cuando se habla de la población entre 25 y 65 años. Pero es que el 53,7 % de los mayores de 65 años son lectores habituales en España, lo que sigue siendo un dato a destacar.

El informe señala una explicación cultural propia de la idiosincrasia española para justificar estos saludables hábitos de cultura en nuestro país: la costumbre de las familias españolas de leer a los hijos antes de que adquieran las herramientas de lectura y escritura.

Señalaba el informe que en el 76,3 % de las familias españolas lee a sus hijos menores de 6 años como parte de sus rutinas familiares, una costumbre que, si bien en España parece muy natural, está menos extendida de lo que parece fuera de nuestro país.

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