El libro de filosofía que pagó una boda

Año tras años, los informes económicos señalan a la de Filosofía como una de las carreras con peor futuro laboral. El Informe sobre el Futuro del Empleo 2023, elaborado por World Economic Forum la sitúa como la segunda profesión con más paro. No corren buenos tiempos para los amantes del saber.

Esta situación no es nueva, pero se ha ido agravando con el tiempo. Hace algunas décadas, José Ortega y Gasset señalaba que «desde 1880 la filosofía va dejando progresivamente de ser un componente de la cultura general», algo inédito en Occidente. El abandono de los estudios humanísticos se evidencia en esos informes que también indican que los graduados en Historia o Literatura tampoco consiguen trabajo dentro de su área de conocimiento.

Sin embargo, este desinterés generalizado por las grandes preguntas filosóficas no siempre ha sido así. A lo largo de la historia, las teorías planteadas por pensadores de todo tipo han guiado el devenir político, social y cultural. Desde el sofismo en el siglo V a.C. al impulso de la revolución proletaria alentada por el marxismo pasando por el razonamiento de la fe católica en el que se empeñaron figuras como san Agustín o santo Tomás.

Desde un punto de vista mucho más mundano y material, los libros de filosofía no siempre han estado relegados al rincón más oscuro de las estanterías. Algunas obras se convirtieron en auténticos superventas y generaron notables beneficios a sus autores.

La boda de Julián Marías

En 1996 el ahora Felipe VI reconocía a un discípulo de Ortega y Gasset el Príncipe de Asturias de Comunicación y Humanidades. Destacaba el ahora rey de España la «limpia trayectoria intelectual» de un hombre que siempre entendió que la filosofía «ha de estar al servicio de la vida». Quien recogía el galardón no era otro que Julián Marías.

Como desgranaba el entonces heredero de la Corona, la prolífica carrera de Marías dio fruto en multitud de monografías, ensayos y artículos de prensa. De todas sus obras, una destaca por su popularidad y por haberse convertido en uno de esos libros que no es difícil encontrar en la estantería de cualquier casa. Su Historia de la Filosofía se reedita con asiduidad y sigue siendo un referente por conjugar a la perfección erudición y sencillez. Recordaba el vallisoletano en sus memorias que «para ser de verdad buen filósofo es menester ser buen escritor».

En ese misma obra, Una vida presente, cuenta Julián Marías el origen de su Historia de la Filosofía. Fue su primer libro, contaba con solo 25 años cuando empezó a escribirlo y el vértigo de afrontar un texto «de esos que se escriben en plena madurez». El impulso necesario para hacer frente a la tarea se lo dio Dolores Franco Manera, «Lolita», su entonces novia, futura esposa y otra figura relevante en el panorama intelectual de la época.

Lolita, como Marías llama una y otra vez a su mujer en sus memorias, escuchó la lectura de cada capítulo después de su composición y a sus manos fue a parar el primer volumen impreso en 1941. Como reconoce el filósofo, el éxito de la monografía, que costaba entonces 20 pesetas, fue «sorprendente». Tanto es así que después de la rápida venta de los 3.500 ejemplares de su primera edición, Julián y Lolita comenzaron a pensar en que aquella obra «haría posible su boda».

El enlace matrimonial se produjo ese mismo 1941 en el que se publicó Historia de la Filosofía. La ceremonia la presidió otra de las grandes figuras del pensamiento español del siglo XX, el recién ordenado sacerdote Manuel García Morente. Aquel año sería el inicio de dos grandes aventuras: un matrimonio que se prolongaría hasta la muerte de Lolita en 1977 y una labor filosófica cuyo legado todavía hoy es estudiado y comentado en facultades de todo el mundo.