Jaleos Jondos, un viaje para soñar el flamenco desde la esencia hasta la vanguardia

Desafía el flamenco tradicional: bebe de su esencia, de su raíz, y lo eleva por sus declinaciones más vanguardistas. Es un viaje sensorial, lleno de duende, donde la mezcla de estilos y disciplinas, lejos de distraer, completan una de las propuestas más arriesgadas –y más completas– de la capital.

Jaleos Jondos, el espectáculo de flamenco contemporáneo que ocupa el madrileño Teatro Magno, conjuga un combo imbatible de artistas de categoría internacional con una dirección escogida a medida para la puesta en escena. Pero sobre todo, transporta al espectador desde el origen de la diáspora gitana hasta los nuevos sonidos electrificados del flamenco actual.

La propuesta está dirigida por Daniele Finzi Pasca, director de espectáculos del Cirque du Soleil como Corteo y Luzia, y cuenta en su concepto con la dirección y producción musical del ganador de varios Latin Grammy Javier Limón (Lágrimas Negras), coreografía de José Maldonado y escenografía y vestuario del premio MAX de teatro y director artístico de Letsgo, Felype de Lima.

Asimismo, la producción añade como colofón el inmenso arte de la gran Carmela Greco, reconocida por la UNESCO como Patrimonio Español, en su papel de matriarca, y artistas de la talla de Saul Quirós y Montse Cortés al cante y Antonio Sánchez a la guitarra. Actuaciones que avalan la calidad única de este show que llega para poner a prueba el concepto tradicional de los tablaos de Madrid y ofrecer una propuesta que rompe por su forma, su sonido y su color.

Flamenco fusión

El espectáculo presenta al espectador un viaje que alcanza más de tres siglos de evolución, conectando cultura y patrimonio desde la misma esencia hasta la vanguardia del flamenco. Además, el recorrido se completa a través de una experiencia gastronómica singular: un menú degustación que está inspirado en el relato interno y en los elementos más significativos del flamenco.

Un recorrido que los maestros Finzi Pasca y Limón han transitado honrando la tradición histórica de los 12 palos del flamenco y dividiendo el espectáculo en las cuatro estaciones del año. Este viaje parte en la profundidad del invierno, donde suenan soleares y siguiriyas, y culmina con la llegada de la luminosa primavera, donde brillan fandangos y sevillanas.

Es el emblemático Teatro Magno el lugar escogido para acoger esta mezcla trascendental. A lo largo de más de 115 años, sus paredes han vivido incontables eventos culturales bajo el nombre de «Salón Madrid», además de su etapa como «sala de frontón para señoritas».

Y no solo eso, sino que su trayectoria ha estado marcada por la Casa Real, ya que fue regalado como obsequio por el Rey Alfonso XIII cuando se enamoró de la gran actriz Carmen Ruiz Moragas, pasándose a llamar Teatro Rey Alfonso. En la actualidad, este histórico edificio sigue sumando anécdotas y siendo una de las salas nocturnas consolidadas en la noche madrileña.