Imagen del terrorista que pretendía atentar en Viena en el concierto de Taylor Swift
Wembley se convierte en una fortaleza para evitar un atentado en los conciertos de Taylor Swift en Londres
La amenaza terrorista obliga a convertir el estadio de Wembley en una fortaleza para garantizar la seguridad de los asistentes a los conciertos de Taylor Swift
Los conciertos de Taylor Swift en Europa, dentro de su gira Eras Tour, se han convertido en un quebradero de cabeza para los responsables de seguridad.
Tras el susto en Viena, donde la policía detuvo a un terrorista de Estado Islámico que planeaba atentar contra los conciertos previstos los días 8, 9 y 10 de agosto con casi 200.000 asistentes previstos, organizadores de la gira y la policía no quieren más imprevistos que obliguen a nuevas cancelaciones.
La gira de la cantante estadounidense finalizará en Londres en una serie de conciertos del 15 al 20 de agosto.
Los organizadores aún no han dicho nada de que se plantee su cancelación, pero lo que sí se ha filtrado es que las autoridades británicas están diseñando un plan de máxima seguridad que implicaría convertir el estadio de Wembley en una auténtica fortaleza.
En Londres el recuerdo del atentado terrorista en Manchester en 2017 durante el concierto de Ariana Grande, donde murieron 23 personas, sigue siendo muy fuerte, y se trata de evitar a toda costa que se repita.
Estas medidas muestran que la tensión en el equipo de la estrella de pop y entre las autoridades británicas es máxima después del intento de atentado en Viena.
El individuo detenido por la policía austríaca tenía planes para atentar muy avanzados. Había sustraído productos químicos con los que había elaborado una bomba que pretendía hacer explotar junto al recinto de concierto.
A continuación, una vez provocada la ola de pánico, el terrorista –que aseguró pertenecer a Estado Islámico– planeaba atropellar con su vehículo a los asistentes que trataran de huir y acuchillarlos.
