Cuatro bellas canciones de amor que son rarezas de sus autores (o de sus intérpretes)

¿Cuántas veces un artista no gusta, pero sin embargo sí por una sola canción? Es un caso curioso y sin embargo repetido. Hay temas de bandas o cantantes que rompen absolutamente con su estilo habitual, tantas veces una excepción en una carrera, que también tantas veces se ha convertido en uno de sus mayores éxitos, cuando no el mayor.

Es el contraste lo que llama la atención. Suelen ser grupos «duros», de rock ruidoso, lo que alguna vez (o más de una) han sorprendido con una delicadeza impensable (también se da el caso contrario), un descubrimiento quizá del verdadero yo que se esconde bajo una imagen y un tipo de música. Las listas y las compañías muchísimas veces han modelado a los nuevos artistas hasta encontrarles el secreto de su éxito, que en tantas ocasiones nada tenía que ver con el impulso personal.

'Baby, I Love You' de Los Ramones

Vale que no fue una canción de Los Ramones. Casi parece una broma viéndoles tocar una canción como esta. La original es de 1963 y la cantaron Las Ronettes, las mismas de Be My Baby, la que muchos críticos creen que es la mejor canción nunca grabada en la historia del pop. El caso es que Los Ramones grabaron Baby, I Love You porque la tenía el mítico Phil Spector, productor de aquellas y de estos y la volvieron a convertir en un clásico, incluso más famoso que el original.

'Somebody' de Depeche Mode

Uno de los grandes temas desconocidos y sin embargo extraordinaria y bellamente famosos de la banda británica. Fue la primera canción que interpretó el guitarrista y compositor Martin Gore (en lugar del vocalista Dave Gahan). Sin teclados, ni baterías, ni sintetizadores, la voz sentida y vibrante de Gore flota en el apogeo de su fama (1984) sobre el único acompañamiento musical, un piano, mientras canta al amor deseado. La anécdota es que dicen que el artista la grabó desnudo, hecho que casi se puede captar al escuchar.

'Beth' de Kiss

Los terroríficos Kiss (no lo eran tanto). Con Beth (que en principio era Beck) la banda neoyorquina que usaba, además de su maquillaje, sangre falsa para aderezar sus conciertos, consiguió en 1976 el mayor éxito de su historia en Estados Unidos. Kiss no le gusta a todo el mundo, pero Beth sí le gusta a (casi) todo el mundo. La canción la compuso el batería de la banda, Peter Criss, sin ninguna expectativa de que una balada de este estilo pudiera ser incluida entre los temas habituales del grupo. Primero se la cantó a sus compañeros y estos le pidieron que se la cantara al productor. Fue incluida en una cara B y después publicada como el sencillo que fue un éxito absoluto.

'Ave María' de Dolores O'Riordan

Es esta una pequeña licencia. Los conciertos de Pavarotti y sus amigos dieron muchas rarezas, algunas de ellas maravillosas como esta versión del Ave María de Schubert. La líder de The Cranberries, la fallecida irlandesa Dolores O'Riordan, acompañó en esta ocasión al también fallecido y gran tenor italiano en una interpretación encantadora.