Investigación
La jueza que frenó el caso Negreira ocultó a la Audiencia que su pareja es proveedor del Barça
El Debate desvela hoy la documentación que acredita el vínculo del empresario Ignasi Pietx con el equipo azulgrana
La jueza de refuerzo que dirigió la instrucción del caso Negreira en su fase inicial, Silvia López Mejía, ocultó a la Audiencia Provincial de Barcelona que su pareja es el proveedor de la cartelería del Fútbol Club Barcelona. De esta manera, la magistrada pudo incurrir en una incompatibilidad manifiesta al existir un conflicto de intereses. En vez de abstenerse por la relación familiar, asumió el caso. El Debate desvela hoy una fotografía del cónyuge de la jueza con el presidente azulgrana Joan Laporta y la documentación que acredita el vínculo del empresario con el equipo de fútbol.
La pareja de la jueza se llama Ignasi Pietx. Es propietario de Artyplan, una empresa de reprografía especializada en impresión corporativa de gran tamaño. Este periódico ha tenido acceso en exclusiva a un documento de la compañía en el que reconocen ser el «proveedor preferente de toda la producción gráfica del club desde el año 2003». Precisamente, una de las especializaciones de Artyplan es la publicidad impresa para eventos de fútbol y Pietx promociona sus servicios usando una imagen del Camp Nou. Entre los trabajos que realizan se encuentran la elaboración de los programas de los partidos, vallas publicitarias, banderas y pancartas y carteles alrededor del campo o en las gradas.
Paralelamente, el Barça tiene registrada a la empresa del cónyuge de la jueza en su programa de patrocinio. El club también ofrece un descuento del 10 % a los socios que contraten los servicios profesionales de Artyplan. Para poder beneficiarse de la rebaja tan sólo hay que presentar el carnet azulgrana, tal y como el propio club explica a sus socios en las comunicaciones que se les envía de manera puntual. «Los socios tienen ventajas en la compra o utilización de los servicios de patrocinadores y empresas colaboradoras. ¡Saca partido a tu carnet!».
Un trabajador de Artyplan ha confirmado a este periódico la participación de la empresa de la pareja de la jueza en la elaboración de la lona que Laporta colgó en Madrid en 2020 para promocionarse como precandidato del club y así volver a optar a presidir el club. La lona, que llevaba como eslogan «Ganas de volver a veros», fue colgada en la fachada de un edificio ubicado en el Paseo de La Habana, en Madrid, a escasos metros del estadio Santiago Bernabéu.
El ideólogo de la lona fue Lluís Carrasco, en aquel momento jefe de la candidatura de Laporta. Carrasco y Artyplan están vinculados a través de la agencia de servicios de marketing y publicidad IPMARK, donde también figura Josep Camps, director de ventas de la empresa del cónyuge de la jueza. Artyplan, en su apartado de productos, defiende que las lonas permiten «una personalización con un acabado totalmente profesional y de calidad. Con unas imágenes claras y nítidas se consigue un efecto publicitario totalmente llamativo».
A parte del nexo económico también hay lazos pasionales, ya que el cónyuge de la jueza se declara abiertamente culé. Así se desprende de las redes sociales de Pietx, donde comparte de manera habitual publicaciones positivas de Laporta. De hecho, El Debate ha tenido acceso a una fotografía que demuestra que el presidente del Barça y el cónyuge de la jueza se han reunido en, al menos, una ocasión. La instantánea se tomó un mes después de que la Fiscalía iniciara la investigación de los pagos de 7,5 millones de euros del Barça a José María Enríquez Negreira, exvicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA).
Frenó la investigación
La instrucción que hizo la jueza Silvia López Mejías durante los cuatros meses del caso Negreira causó extrañeza en las altas instancias judiciales al apreciarse continuos retrasos. No se decretó ningún registro, todo se encontraba paralizado, los plazos se apuraron hasta el final y su acción se limitó a tramitar cuestiones meramente burocráticas. De hecho, como consecuencia de la inactividad de la magistrada, la tesis que el Barça difundió es que el caso no avanzaba porque no había nada en contra del club y que, por este motivo, la investigación estaba abocada al archivo.
Tal y como explican fuentes judiciales, la relación entre el cónyuge de la jueza y el Barça «tendría que haberla obligado a dictar un auto decretando su abstención». Las causas de abstención para los jueces están descritas en el artículo 219 de la Ley del Poder Judicial, donde se mencionan las relaciones conyugales, las amistades o enemistades con las partes implicadas y el interés directo o indirecto en el asunto.
Las demoras de la magistrada comenzaron desde el primer momento, cuando llegó la querella del árbitro del VAR Xavier Estrada Fernández. En un primer lugar, la magistrada no la admitió a trámite alegando un defecto de forma, hasta que la Fiscalía interpuso su denuncia, que entonces ya sí que la aceptó. Este hecho provocó un primer retraso de diez días que se alargó varios más hasta que la jueza se entrevistó con los agentes de la Guardia Civil que investigan el caso. Esta segunda demora provocó otro retraso más. Cuando los investigadores respondieron se volvió a tardar en admitir las pruebas y así sucesivamente.
Tampoco tomó declaraciones relevantes ni resolvió los escritos en los que se solicitaban la práctica de pruebas. En el sumario figuran dos escritos de este tipo, uno de La Liga y dos de Estrada. La juez respondió que «una vez que la Guardia Civil haya presentado su informe se resolverá sobre las pruebas que solicitan». Algo contradictorio ya que precisamente, para que los investigadores puedan presentar su informe se tienen que practicar las pruebas.
Pero el punto más polémico de la instrucción de López Mejía fue cuando, a finales del pasado mes de junio, notificó a los medios de comunicación el auto de prórroga del secreto del sumario, hecho que provocó un riesgo para la propia investigación. En ese auto se podían apreciar las diligencias que se estaban practicando en secreto en la causa. También las que estaban pendiente de llevarse a cabo que habían sido pedidas por la Guardia Civil. Entre ellas se encontraban la adquisición de «629 informes originales al Barça y 4 informes internos sobre la comparecencia del 17/04/23 del Presidente del FCB, Joan Laporta».
Tras el revuelo que se formó, la magistrada justificó el desliz en privado como fruto del agobio y la falta de tiempo por la carga de trabajo. El Debate se ha puesto en contacto con la jueza a través del Juzgado de Instrucción número 9 de Barcelona, del que es titular en la actualidad, para conocer su versión de los hechos pero no ha habido respuesta.