La Guardia Civil registra el alojamiento de Rubiales en República Dominicana
Aunque el expresidente de la RFEF aseguró que volvería a España este sábado 6 de abril, las UCO ha preferido iniciar pesquisas este mismo lunes
La Unidad Central Operativa de la Guardia Civil (UCO) ha registrado el alojamiento temporal del expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) Luis Rubiales en República Dominicana, han confirmado a EFE fuentes próximas al caso.
En concreto, este registro, tal y como ha adelantado la Cadena SER, lo llevaron a cabo este lunes agentes de la UCO junto a miembros de las fuerzas y cuerpos de seguridad de República Dominicana.
El expresidente de la RFEF se encuentra en República Dominicana desde antes incluso del registro que el pasado 20 de marzo realizó la UCO tanto en su domicilio de Granada como en la Ciudad del Fútbol de Las Rozas, donde tiene su sede la federación y donde, en ese momento, la selección encontraba concentrada.
El Debate localizó a Rubiales en la isla, completamente ajeno a este operativo, en una cafetería próxima al aeropuerto. Tras enterarse de lo sucedido, aseguró que volverá a España este sábado 6 de abril y negó rotundamente que esté buscando nacionalizarse allí para eludir la acción de la Justicia y seguir con su vida en la isla.
La investigación que dirige el Juzgado de Instrucción 4 de Majadahonda se inició a raíz de una querella presentada por el presidente de la Escuela Nacional de Entrenadores de Fútbol en España (Cenafe) y de la Asociación Transparencia y Democracia en el Deporte, Miguel Galán, en mayo de 2022, contra Rubiales y Piqué por delitos de corrupción en los negocios y administración desleal.
Todo viene a raíz del traslado de la Supercopa de España a Arabia Saudí, una operación no exenta de polémica por el hecho de que un jugador todavía en activo (Gerard Piqué) realizara negocios con el máximo organismo del fútbol nacional. En esa querella, que reproducía informaciones publicadas por la prensa, Galán acusaba a Piqué y Rubiales de acordar «un plan para lucrarse con 24 millones de euros» a costa de la RFEF, una comisión presuntamente pactada por celebrar la Supercopa en Arabia.