La expulsión a Doncic corta la reacción de los Mavericks y Boston pone el 3-0 en las Finales

Ni sin Kristaps Porzingis en Boston, aquejado de una lesión, y con Kyrie Irving de bienvenida en la serie, jugando bien tras dos partidos donde dejó a deber, los Mavericks pudieron derrotar a los Celtics. Lo rozaron, poniéndose realmente cerca en los últimos minutos de partido tras un tremendo parcial de 22-2, pero la expulsión de Luka Doncic tras seis faltas personales, la primera de su carrera en playoffs, dejó sin gasolina final a los texanos.

Lo ganaron los Celtics que rozaron la excelencia en el tercer cuarto con un juego coral, la cima del spacing, los recuerdos de los Spurs de Popovich de 2014, y la cumbre de carrera de Jaylen Brown, que está jugando un baloncesto imparable. Se ponen 3-0 en la serie, a una victoria del título, con una ventaja que nunca se ha desperdiciado en la historia de este deporte.

Jayson Tatum, que había sido eclipsado en los dos primeros juegos por Porzingis y Jrue Holiday, mostró su calidad en esta ocasión. Sin embargo, fue Brown quien se destacó en el último cuarto, anotando 24 de sus 30 puntos en la segunda mitad y ayudando a su equipo a resistir un feroz intento de remontada de los Mavericks, que lograron un parcial de 22-2 para reducir la diferencia a solo tres puntos.

Derrick White también jugó un papel fundamental con 16 puntos y cuatro triples importantes. El veterano dominicano Al Horford contribuyó con ocho puntos, cinco rebotes, dos asistencias y dos robos, acercándose al tan ansiado anillo.

A pesar de su esfuerzo, los Mavericks están ahora en una situación muy difícil, ya que ninguna de las 154 series anteriores en la historia de la NBA ha visto a un equipo remontar un 0-3. Kyrie Irving anotó 35 puntos para Dallas, pero su contribución no fue suficiente para evitar la derrota.

El partido comenzó con un ritmo intenso, con los Mavericks tomando una temprana ventaja de 25-12 gracias a la agresividad de Irving y Doncic. Sin embargo, los Celtics respondieron con un parcial de 11-0 para volver a meterse en el juego. Al descanso, el marcador era 50-51, con Tatum sumando 20 puntos para mantener a su equipo en la contienda.

En el tercer cuarto, los Celtics tomaron el control con un parcial de 35-19 liderado por un imparable Brown. Boston tiró con un 65 % de efectividad en tiros de campo y anotó cinco triples. Aunque los Mavericks intentaron mantenerse en el juego, la defensa de los Celtics y los triples cruciales de White y Tatum establecieron una ventaja significativa.

A pesar de un último intento de remontada por parte de los Mavericks, con un parcial de 20-2 que los acercó a solo tres puntos, la expulsión de Doncic y la defensa de Holiday sobre Irving aseguraron la victoria para los Celtics. White anotó un triple crucial para poner el marcador en 98-92, lo que permitió a los Celtics mantener la ventaja hasta el final.

Los de Boston, a pesar del susto final, ahora ven la gloria al alcance de la mano, con la posibilidad de cerrar la serie y asegurar el título en su próximo enfrentamiento. 16 años después, en lo que sería el decimoctavo título de la franquicia, desempatando con los Lakers en lo alto del palmarés.