Milinkovic-Savic, de poder triunfar en Europa y jugar con España, a optar por Serbia e irse a ganar dinero a Arabia

En ocasiones, el fútbol trae consigo historias cuanto menos curiosas que suelen despertar la atención de los lectores. De eso no hay ningún tipo de duda. Y la de Sergej Milinkovic-Savic, actual jugador del Al-Hilal de la Liga saudí, es una de ellas.

El pivote defensivo nació en Lérida el 27 de febrero del 1995 y es hijo de Nikola Milinkovic, un exfutbolista serbio que seguro que le suena a los más veteranos y que hizo carrera en algunos clubes de nuestro fútbol como la UE Lleida o el Ourense. Además, fue un destacado delantero con un talento excepcional que se vistió de corto en la década de los 90 y principios de los 2000. Y se dio la casualidad de que cuando su padre estaba defendiendo los colores del club catalán, Sergej, el hermano pequeño de esta familia serbia, nació en la ciudad catalana.

La estancia de Nikola en España duró relativamente poco. Le pasó lo que a muchos futbolistas: cambios de equipos constantes, falta de adaptación. Y en sus últimos años como profesional, Nikola emigró hacia Austria y en dicho país, tanto Sergej como Vanja (el hermano menor) empezaron a descubrir el fútbol en tierras austríacas. De hecho, el pivote dio sus primeras patadas en la academia del Grazer Athletik-Sport Club. Sin embargo, la familia volvió a Serbia y Sergej pasó al equipo juvenil Fudbalski Klub Vojvodina Novi Sad.

La carrera de Sergej Milinkovic-Savic ha estado marcada por los constantes cambios. De Serbia se trasladó a Bélgica para luego acabar en Italia. En el país transalpino, el pivote sí consiguió destacar como futbolista. El serbio estuvo un total de ocho temporadas en la Lazio y fue uno de los grandes ídolos del conjunto romano.

En su tiempo en Italia llamó la atención de alguno de los grandes clubes europeos como el Real Madrid, Manchester United o el Chelsea. Tenía todas las de triunfar en el Viejo Continente, pero al final acabó decantándose por los millones saudís, lo que le ha perjudicado porque su carrera ha ido para abajo con tan solo 29 años.

Pudo jugar con España

Pues bien. Sergej Milinkovic-Savic pudo jugar con España. Como lo leen. Esto fue debido a todo el tiempo que pasó su padre en nuestro país y a que nació en Lérida. Podría haber tenido la doble nacionalidad, pero a la hora de la verdad, Sergej fue fiel a sus principios y tomó la decisión de representar a Serbia, el país de sus progenitores.

Además de esto, la RFEF no hizo el esfuerzo suficiente a la hora de apostar por él. Esto no es nada nuevo. Algo parecido sucedió hace no mucho con otros jugadores de clase mundial como Achraf Hakimi, Alejandro Garnacho y con Brahim Díaz (el caso más reciente).

Viendo su posición en el terreno de juego, la realidad es que Sergej Milinkovic-Savic no habría tenido demasiadas oportunidades de brillar con la selección española. Tendría que haber competido por el puesto con un jugador top mundial como Sergio Busquets, dueño y señor de esa posición (que ahora ocupa Rodri Hernández) hasta el 16 de diciembre de 2022, fecha en la que dejó el combinado nacional.

Entonces, optó por jugar con Serbia, selección en la que es un auténtico referente y que ya ha tenido la oportunidad de jugar los dos últimos Mundiales (2018 y 2022) y en alguna que otra Eurocopa, torneos que con España no habría podido disputar.

Y en este 2024, después de completar su primera temporada en Arabia, ha vuelto a ser convocado con Serbia y espera poder, de una vez por todas, llegar lejos con su selección en una Eurocopa. Pero antes tendrá que enfrentarse a Inglaterra, Dinamarca y Eslovenia en un grupo en el que aspira a pasar como segunda clasificada o como una de las mejores terceras.