La fuerza del grupo: el factor diferencial para entender el éxito de la España de De la Fuente

Casi nadie confiaba en la selección española en la presente Eurocopa. Luis de la Fuente no enganchaba lo suficiente y había muchas dudas en torno al equipo. Fueron muchas las críticas. Que si no había un líder, que si el equipo era demasiado joven, que si no se jugaba a nada. Con tanto negativismo, el vaso se veía medio vacío y así se llegó a tierras alemanas.

Había razones para pensar que el torneo iba a volver a ser un fracaso. Se podía pensar eso. Al final, la libertad de expresión está para algo. Pero lo cierto es que Luis de la Fuente ha respondido a todas esas críticas con buen fútbol y, sobre todo, con resultados. Llegar a las semifinales de la Eurocopa no es sencillo y el técnico riojano ha conseguido convencer a los más críticos.

Gran parte del éxito de la selección española en la Eurocopa de Alemania radica en la fuerza del grupo. Los jugadores confían más que nunca en el proceso y han estado unidos cuando más falta hacía. Así se ganan esta clase de torneos. Yendo todos a una y creyendo en sus posibilidades. Y las cosas como son. España está a tan solo dos partidos de volver a ganar una Eurocopa, que sería la cuarta de su historia y que le colocaría como líder indiscutible en esta clasificación particular.

La concentración para la Eurocopa de Alemania comenzó el sábado 1 de junio y desde el primer día la palabra que más se ha pronunciado ha sido la de equipo. Filosofía muy cholista esta. Y la verdad es que la selección española es un grupo y todos aportan su granito de arena. Normal que Luis de la Fuente defienda a muerte a sus futbolistas. Los conoce mejor que nadie y sabe qué pueden aportar en según qué momentos.

Lo unido que está el grupo se pudo comprobar en el partido de cuartos de final de la Eurocopa frente a Alemania, la anfitriona del torneo. En la prórroga, De la Fuente optó por dar minutos a los menos habituales y los Joselu, Nacho, Oyarzabal y Merino rindieron de maravilla y dieron la cara para dejarle claro al seleccionador que están listos para cuando los necesiten.

La inmensa mayoría de los futbolistas que han ido convocados a la Eurocopa de Alemania se conocían de antes. Compartieron torneos en las categorías inferiores y tener esa sintonía dentro del terreno de juego se antoja como vital para lograr grandes éxitos. Los Dani Olmo, Ferran, Fabián, Oyarzabal, Unai Simón se conocen y con un simple guiño ya saben lo que van a hacer.

Al término del partido de cuartos frente a Alemania, Luis de la Fuente quiso poner en valor la unión de sus pupilos. «Están todos enchufados y sé que no nos van a fallar. Es un equipo comprometido y es un ejemplo para el país y para la sociedad. Me he acordado de cuando ganamos el Europeo en Grecia (2015), y aquí estaban muchos de aquellos jugadores. Para mí es un orgullo dirigirlos porque llevamos diez años juntos. Es un grupo ganador, pero lo es desde siempre».

Esta sintonía también se refleja dentro del campo. Cada día que un jugador habla ante los medios de comunicación, los elogios hacia Luis de la Fuente son constantes. El último en hacerlo fue Dani Olmo, MVP del duelo ante Alemania. «Siempre está ahí cuando lo necesitas. Motivador nato y nos tiene a tope a todos y la consecuencia es que vamos a tope a por todo».

El siguiente paso antes de la final es el partido frente a la Francia de Kylian Mbappé. No será fácil, pero España ya ha demostrado que está capacitada para cualquier cosa. Ante los galos, De la Fuente tendrá que volver a demostrar el grado de involucración de todos los futbolistas, sobre todo con las bajas por sanción. El técnico riojano no podrá contar ni con Carvajal ni con Le Normand, con lo cual le tocará tirar, a priori, de Jesús Navas y de Nacho Fernández.

En definitiva, la fuerza del grupo ha sido el elemento clave para entender el éxito de España en la Eurocopa de Alemania. Y se ha llegado al punto de considerar a la selección española como la principal favorita para llevarse la copa para casa el próximo 14 de julio en Berlín. Todas esas críticas se han tornado en elogios. El método De la Fuente funciona de maravilla.