Verstappen continúa imparable en una nueva exhibición en la carrera al sprint de los Estados Unidos

El neerlandés Max Verstappen (Red Bull), flamante tricampeón del mundo, se apuntó una nueva victoria, esta vez en la carrera al sprint en el Gran Premio de EEUU, donde los españoles Carlos Sainz (Ferrari) y Fernando Alonso (Aston Martin) quedaron sexto y décimo tercero respectivamente.

En un paseo triunfal por el circuito de Austin (Texas) Verstappen solo tuvo que ponerse el mono de trabajo durante los primeros metros del circuito, en los que, tras encenderse el semáforo, echó hacia el interior de la recta principal al monegasco Charles Leclerc (Ferrari), que salía segundo, para asegurarse de que no le pudiera adelantar.

Ese movimiento aupó precisamente al británico Lewis Hamilton (Mercedes), que aprovechó para superar al de Ferrari y comenzar una 'caza' hacia el neerlandés que duraría cinco vueltas, tiempo suficiente para que 'Mad Max' se escapara en solitario, mientras el siete veces campeón se adueñaba de la segunda posición y Leclerc, de la tercera, como así cruzarían finalmente la línea de meta.

Por detrás, Sainz cambió de estrategia y fue el único del paddock en salir con neumáticos blandos, una ventaja que aprovechó en las dos primeras vueltas para superar primero al australiano Óscar Piastri (McLaren), que poco a poco fue perdiendo fuelle hasta la décima posición, y a Norris, que no obstante le devolvió el adelantamiento después y cruzó la bandera a cuadros cuarto.

Alonso, sin ritmo

Alonso, que tras la salida había descendido hasta la décimo quinta posición, terminó décimo tercero, en una carrera en la que no consiguió puntos y en la que vio cómo su gran rival por la tercera plaza del campeonato, Lewis Hamilton, acababa en segunda posición, lo que le da siete puntos al británico.

El español aseguró que «es frustrante dormir hoy sabiendo que las posibilidades de conseguir algún punto en la carrera de este domingo son muy bajas».

«Hemos sido poco competitivos desde los primeros libres, demasiado lentos y sin ritmo», comentó Alonso, que se mostró muy autocrítico y que resaltó que es un fin de semana «doloroso de asimilar» pero del que hay que aprender.

Así, insistió en que en la carrera del domingo hay que «dar lo máximo y optimizar el coche lo máximo posible», aunque resaltó que discutirán en el equipo «si es mejor tocar alguna configuración del coche y salir desde pit lane o no».

Asimismo, destacó que uno de las desventajas del fin de semana es que no pudieron optimizar bien el coche por las pocas vueltas dadas: «Creemos que el coche puede dar más de sí y no lo hemos optimizado lo suficiente. Esperamos que en Mexico podamos dar más vueltas», incidió el asturiano.