El enfado de Fernando Alonso con Aston Martin al aplazar el proyecto de hacer un coche campeón

La Fórmula 1 es uno de los deportes más crueles que existen. Por mucho que un piloto sea de los mejores de la parrilla, si el coche no le acompaña no tiene ninguna opción de pelear por victorias y hacerse un hueco en la historia de la competición. De eso sabe mucho Fernando Alonso, leyenda de la F1, pero no tanto como su gran nivel merece. Pocos pilotos tienen su talento.

El bicampeón mundial triunfó en 2005 y 2006 con Renault y desde entonces ha intentado volver a hacerlo en diferentes escuderías. McLaren, Ferrari, nuevamente McLaren, Alpine y ahora Aston Martin. Todos estos equipos han tenido a Alonso en sus filas, pero en ninguno ha conseguido su ansiada tercera corona. Donde más cerca se quedó fue en la escudería italiana en 2012, pero Red Bull era muy superior y Sebastian Vettel se terminó llevando el gato al agua.

Los años han pasado, pero el hambre de Alonso por lograr el objetivo que tiene entre ceja y ceja sigue siendo el mismo. A sus 43 primaveras sigue viéndose con nivel para ser campeón mundial y lo cierto es que lo tiene. Únicamente necesita un coche que le acompañe, pues cuando cuenta con él, como sucedió al inicio del pasado curso, responde con resultados. Ocho podios y cuarto en el Mundial de pilotos fue el balance de Fernando en 2023.

Desgraciadamente, Aston Martin dio varios pasos hacia atrás en 2024 y el AMR24 –nombre del coche de este año– es mucho menos competitivo que su predecesor. De hecho, cuesta encontrar en la parrilla un monoplaza menos competitivo que el que conduce Fernando Alonso. La escudería británica ha hecho un mal trabajo y los ojos ya están puestos en la próxima temporada, o incluso en 2026.

Un proyecto ganador

Si hay algo que ha demostrado Aston Martin desde que llegó a la Fórmula 1 es que no están ahí para pasar sin pena ni gloria. Están trabajando en hacer un coche ganador y la inversión es enorme. Cuentan con tecnología de la más avanzada en el Gran Circo y además han incorporado al gurú de la aerodinámica en los últimos 20 años, Adrian Newey. Un ingeniero que es el gran artífice del éxito de Red Bull.

A pesar de tener todas estas armas, en Aston Martin no quieren correr. Las prisas nunca son buenas, aunque Alonso no tiene demasiado tiempo. Es cierto que sigue a un nivel estelar y trabajando a destajo, pero la edad no perdona y los años pasan para todo el mundo. Por ello, su objetivo estaba en aguantar hasta 2026, que era cuando se preveía que el coche iba a aspirar al Mundial, pero ahora se ha postergado hasta 2027, cuando el ovetense tendrá 46 años.

Tal y como ha explicado Jefferson Slack, director comercial y de marketing del equipo, la temporada 2026, que marca la entrada de un nuevo reglamento técnico, no será el año en el que vean al equipo luchando por el campeonato del mundo. Ahí se prevé que puedan ganar algunas carreras, pero el Mundial lo ven complicado.

Aun así, de ser cierto, Alonso estará en buena posición de lograr su ansiado triunfo número 33. «El cambio va a ser en 2026 y tenemos todas las herramientas en su lugar para conseguirlo, pero mirar hacia la lucha por campeonatos del mundo probablemente será en 2027», afirmó.

Con contrato hasta 2026

Se desconoce como le han caído estas palabras a Fernando Alonso, pero todo se pospone un año más. En Silverstone están trabajando duro para lograr lo que se proponen, pero no quieren ponerse plazos que no puedan cumplir. No obstante, esto es un mazazo para Alonso, que acaba contrato en 2026 y a partir de ahí su futuro es una incógnita.

Él nunca ha dicho que no vaya a renovar, pero evidentemente ha dejado entrever que no le quedan muchos años en la Fórmula 1. De todos modos, todo dependerá de su rendimiento y sus ganas y está claro que si el monoplaza de 2027 aspira a ganar el Mundial, Fernando tratará de quedarse y darse una última oportunidad de lograr su deseado tercer título.