
Fernando Alonso, en la presentación del AMR25
Los 7 motivos técnicos del nuevo Aston Martin que podrían ilusionar a Fernando Alonso
El AMR25 es muy similar al monoplaza del curso pasado, aunque los cambios podrían convertirlo en un coche competitivo
Aston Martin presenta el AMR25, el coche con el que Alonso espera volver a sonreír
Aston Martin presentó el pasado domingo el AMR25, su monoplaza para la temporada 2025 de Fórmula 1. El coche no presenta grandes novedades respecto al curso anterior, pero aun así Fernando Alonso y la escudería británica confían en recuperar el protagonismo perdido con las mejoras introducidas. Tras una temporada 2024 marcada por altibajos, el equipo de Silverstone ha llevado a cabo una transformación técnica con el objetivo de solucionar las debilidades del coche anterior y acercarse a la lucha por los podios e incluso, si las circunstancias lo permiten, por las victorias.
Uno de los principales problemas del AMR24 fue su inestabilidad en el límite. Alonso sufrió en varias ocasiones para controlar un coche impredecible, algo que Aston Martin ha tratado de corregir con cambios aerodinámicos clave. El AMR25 presenta una aerodinámica más refinada que, en teoría, debería ofrecer un mayor equilibrio en la conducción. Esto además lo han hecho sin la ayuda de Adrian Newey, considerado el gurú de la aerodinámica y que no podrá tocar el coche hasta que comience la temporada.
Además, la escudería ha rediseñado por completo los alerones delantero y trasero. Durante la pasada temporada, las modificaciones en estas áreas no lograron los efectos deseados, obligando al equipo a volver a configuraciones anteriores. Para 2025, la nueva configuración aerodinámica busca mejorar la eficiencia y la carga sin comprometer la estabilidad del coche, algo que es claramente una de las asignaturas pendientes.
Los pontones (secciones laterales del chasis que están ubicadas entre las ruedas delanteras y traseras) también han sido objeto de un rediseño profundo, adoptando una forma más curvada que optimiza el flujo de aire y mejora la refrigeración de los radiadores. Esto podría ayudar a prevenir problemas de sobrecalentamiento, una preocupación recurrente en 2024.Más cambios en el AMR25
Otro cambio relevante es el rediseño de la cubierta del motor, que ahora incorpora una cresta afilada para mejorar la gestión del aire hacia la parte trasera del monoplaza. Y aunque Aston Martin ha sido hermético respecto a los cambios en el suelo del coche, parece evidente que han trabajado en esta zona clave para maximizar la eficiencia aerodinámica y aumentar la velocidad punta.
Más allá de la aerodinámica, el equipo ha trabajado en otras áreas clave, como la integración del motor Mercedes y la puesta a punto de la suspensión para mejorar la tracción y la respuesta del coche en curva. Además, se espera que el AMR25 llegue con un programa de desarrollo más agresivo que el del año pasado, lo que podría marcar la diferencia en una temporada que se prevé muy competitiva.

Aspecto del AMR25 de Fernando Alonso
Si bien la gran revolución de la Fórmula 1 llegará en 2026 con el nuevo reglamento, Aston Martin no ha querido resignarse a un año de transición –como parecía que iba a ocurrir en un principio– y apuesta por una evolución ambiciosa que le permita volver a pelear en la parte alta de la parrilla. La incógnita ahora es si estos cambios serán suficientes para que Alonso y su compañero, Lance Stroll, puedan desafiar a Red Bull, Ferrari y Mercedes con mayor regularidad.
Las primeras respuestas llegarán en los test de pretemporada en Bahréin, donde el AMR25 se enfrentará a su primera prueba real en pista. Hasta entonces, la esperanza de los aficionados de Aston Martin y los seguidores de Alonso está puesta en que esta vez, como ocurrió en 2023, se dé la sorpresa y no sea un año tan decepcionante como 2024.