La empresa de Negreira dejó de tener ingresos cuando acabaron los pagos del Barça

Conforme pasan los días, se van conociendo más detalles acerca de la empresa Dasnil 95 SL, la compañía que creó el que fuera vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros hasta 2018 y a través de la que canalizaba los pagos del FC Barcelona. La Fiscalía de Barcelona abrió una investigación en 2021 por la facturación de los años 2016, 2017 y 2018, los únicos que aún no han prescrito. En ese periodo, la empresa de José María Enríquez Negreira ingresaba más de medio millón de euros, un volumen que desapareció nada más terminar su vinculación con el Barça.

Según los documentos a los que ha podido acceder El Debate, Dasnil 95 SL generó unos ingresos de 562.840,12 euros en 2017, cifras que se redujeron un 41 % en 2018, hasta los 329.373,39 euros. Estos datos coinciden con la finalización del contrato con el Barcelona, que termina en junio sin llegar a cobrar por el año completo. La última factura que está en manos de Hacienda está fechada el 5 de junio de 2018, como adelantó El Mundo.

A partir de ahí se rompe la vinculación entre la empresa de Enríquez Negreira y el club culé. Desaparecen entonces las cifras positivas en Dasnil 95 SL, que notifica unos ingresos de solo 7.384,43 euros en 2019 y de cero en 2020, lo que demuestra la dependencia que tenía la compañía de su vinculación con el Barça. El primer año registra unas pérdidas de 5.984.81 euros y en 2020 cesa su actividad, pero no precisamente por el impacto de la pandemia.

También desciende el gasto en personal al terminar la relación contractual con el Barça. Si en 2017 gastaba 122.000 euros al año en trabajadores y en 2018 esa partida superaba los 150.000, a partir de 2019 se reduce a cero. La compañía deja de necesitar empleados porque ya no realizaba tareas de «asesoramiento a través de vídeos técnicos», el concepto que se indicaba en las facturas que se remitían a la sede del FC Barcelona.

Neutralidad arbitral

La Agencia Tributaria está investigando la facturación de Dasnil 95 SL con el Barcelona entre 2016 y 2018. Las sospechas se centran en unos ingresos de 532.728,02 euros en 2016; de 541.752 euros en 2017 y de 318.200 en 2018. Según declaró a Hacienda el propio José María Enríquez Negreira, dichos pagos eran relativos al «asesoramiento técnico del Fútbol Club Barcelona» pues estos querían garantizarse que «todo fuera neutral» en sus partidos.

El club catalán ocultó a todos los niveles estos contratos con la empresa del número dos de los árbitros. De los supuestos informes que se elaboraban no sabían nada los entrenadores, como aseguró Ernesto Valverde, y mucho menos los socios que aprobaban las cuentas cada año. Incluso en la página de Transparencia del club se ocultaba la existencia de Dasnil 95 SL como proveedor, como ya informó este periódico.

Enríquez Negreira no tenía gran poder en el día a día del Comité Técnico de Árbitros pero sí era la mano derecha del presidente Sánchez Arminio. Él era, además, el encargado de notificar a los árbitros los ascensos y descensos de categoría, lo que implicaba también los aumentos o reducciones de sueldo. Por el momento, todos los colegiados han negado que tuvieran trato con él, aunque algunos sí estuvieron en contacto con su hijo.

Javier Negreira era un psicólogo que ofrecía sus servicios de asesoramiento en el CTA y fue contratado por algunos colegiados. Él era quien los acompañaba al Camp Nou cuando les tocaba arbitrar en Barcelona y les aconsejaba. Si tenía o no influencia sobre ellos o en sus actuaciones se desconoce hasta el momento. Muchos cabos sueltos aún en escándalo que ha salpicado al fútbol español.