El mejor centro del campo del mundo es del Real Madrid
El Madrid posee dos líneas medias espectaculares y solo puede jugar una; Camavinga, Tchouaméni y Ceballos hacen que Modric, Kroos y Valverde tengan que rendir al máximo siempre
Tiene 33 y continúa jugando como un mariscal de campo. Se llama Toni Kroos. Tiene 37 y sigue mostrando el talento que le donaron los dioses. Modric es su nombre. Se temía con lógica genética que ya hubieran acabado su periplo triunfal, pero su biología destroza los algoritmos del ADN. La preocupación del Real Madrid por encontrar relevo a Kroos, Modric y Casemiro durante el último trienio ha supuesto que haya formado un centro del campo insuperable. Camavinga fue fichado hace dos años para tomar el testigo de Kroos y Modric por los interiores. Tchouaméni vino hace nueve meses para cubrir el adiós de Casemiro. Valverde ya había inyectado dosis de tranquilidad a la cúpula del club al comprobar que podía cubrir la posición de Luka. Y Ceballos comenzó a florecer en cuanto le dieron partidos. La confluencia de estos seis hombres ha significado que Ancelotti disfrute del mejor centro del campo del planeta.
El técnico italiano cuenta con dos líneas de tres para relevarlas de golpe. Ningún club del mundo disfruta de seis hombres de tanta clase para dirigir un equipo. El entrenador del campeón de Europa soporta el bendito problema que bendecía Molowny: sufre para decidir a quien deja en el banquillo.
El secreto, provocar competencia
La clave para mantener a los seis futbolistas implicados y listos para jugar es que el responsable deportivo del Real Madrid genera la competencia interna de ellos como chispa para tenerlos a tope cada tres días.
Vivimos el primer ejemplo con el puesto de mediocentro. Tchouaméni fue titular desde el primer día de agosto porque Ancelotti quería que asumiera el rol de Casemiro sin descanso, con el fin de adquirir en este primer año la experiencia que se obtiene normalmente en tres. Aurelien fue titular durante medio año y asumió bien la responsabilidad como pivote del esquema. Disputó el Mundial y, al regreso de Qatar, una lesión le apartó del once. Fue la oportunidad de Camavinga quien, acostumbrado a ser el revulsivo excelente de los segundos tiempos, como constatamos en la pasada Champions, se ha ganado el sitio como medio centro titular sin discusión. En el Real Madrid no puedes permitirte ni lesionarte porque hay tanta calidad que te quitan la silla sin haberla siquiera barnizado.
La multipolaridad de Valverde para ser interior o extremo derecha ha permitido a Carlos Ancelotti jugar con cuatro mediocampistas reales y mantener a Modric y Kross juntos en el sistema.
El rendimiento de Ceballos cuando ha salido en el lugar de Kross o de Modric aporta una sexta veta a la estrategia del italiano. El utrerano ha merecido ser titular en el comienzo de este año y el preparador no debe relegarle de nuevo a jugar diez minutos.
Sentar a las dos vacas sagradas
La directiva del Real Madrid fichó a Ancelotti con la exigencia de producir el cambio tranquilo e introducir en el equipo a los jóvenes como Valverde, Tchouaméni, Ceballos, Camavinga y Rodrygo. Lo está haciendo, pero le cuesta sentar al alemán o al croata. Hay un hecho claro: cuando el rival es muy fuerte físicamente no pueden jugar los dos, porque si no dominan el tempo del partido se necesitan gladiadores con mayor energía y capacidad destructiva.
Real Madrid 1-0 Liverpool
El Real Madrid pasa a cuartos de Champions tras un nuevo ejercicio de liderazgo europeo
Sucedió la temporada pasada frente al PSG, el Chelsea y el City. Ancelotti dio entrada a Camavinga en las segundas partes para obtener la potencia necesaria y con el francés en el campo se ganó la Champions. Ahora debe volver a hacerlo si desea aspirar a los títulos. Camavinga es titular y los revulsivos son Ceballos y Tchouaméni. Recordemos que en el espectacular triunfo por 2-5, en Liverpool, Kross fue suplente.
La diatriba de Ancelotti es qué centro del campo presentar en el Camp Nou el domingo, cuatro días después del desgaste en la Champions.
Quién juega el clásico
En la final de la Supercopa de España los azulgrana vencieron al Real Madrid por 3-1 con Kroos y Modric en el once. Se notó la inferioridad física madridista ante las revoluciones que Gavi y Pedri pusieron en el césped árabe.
Extrañó, en este sentido, que Modric y Kroos jugaran más de 80 minutos frente al Liverpool con la eliminatoria ganada. Se augura que Ancelotti repetirá en el Camp Nou el equipo que venció al Liverpool. Pues puede haber alguna sorpresa en ese 4-4-2 con Valverde como cuarto centrocampista. Ancelotti tiene seis mimbres para realizar todas las combinaciones que quiera. Nadie cuenta con seis medios de tanto nivel y debe aprovechar esta superioridad.