Mourinho se enfrenta a una sanción muy dura por su comportamiento en la final de la Europa League

La UEFA ha tomado nota de lo ocurrido el pasado miércoles en la final de la Europa League y ha abierto varios procedimientos disciplinarios en el que quien sale peor parado es José Mourinho.

El técnico portugués de la Roma se enfrenta a una sanción muy dura ya que está acusado de «lenguaje insultante y abusivo contra un oficial de partido», en referencia al árbitro.

Se refiere ala UEFA a las actuaciones y palabras de Mourinho después de la final: «Nos vamos a casa muertos por una injusticia», dijo en rueda de prensa. Sin embargo, lo más sancionable estuvo en el parking del Estadio Ferenc Puskas de Budapest.

Allí Mourinho esperó al árbitro y le insultó a gritos de «vergüenza». El portugués fue a increpar al colegiado una vez que el equipo arbitral subía al autobús camino de su hotel. Eso le lleva ahora a ser investigado por la UEFA, que le podría poner varios encuentros de sanción.

A raíz de estas críticas al árbitro, cabe también señalar que el colegiado de la final, el inglés Anthony Taylor, sufrió el acoso de varios aficionados de la Roma en el aeropuerto de Budapest.

Además del procedimiento disciplinario al que se enfrenta Mourinho, la UEFA ha hecho lo mismo con los dos clubes finalistas, el Sevilla y la Roma. En lo que se refiere al equipo español se enfrenta a sanciones por invasión del terreno de juego, lanzamiento de objetos, encendido de bengalas y conducta impropia del equipo.

Por su parte, los cargos contra la Roma se refiere, además de lo ya comentado por lo hecho por su entrenador, a lanzamiento de objetos, encendido de bengalas, actos de daños, alteración del orden público y conducta impropia del equipo.