Nacho Fernández sigue en el Real Madrid y será el primer capitán
El canterano rechaza la gran oferta del Inter y decide renovar tras escuchar el apoyo popular y mantener una reunión decisiva con José Ángel Sánchez
Español, madrileño, alcalaíno, seguro, fiable, serio, creíble, regular, diabético, sacrificado. No, no podía irse. Le tiran los colores. Le quema el amor por el Real Madrid. No puede dejar a su equipo del alma aunque clubes italianos y alemanes de primer nivel le otorgan contratos por tres años y por más dinero. Nacho se queda y firma por un año más por la casa blanca.
20 años lleva José Ignacio Fernández iglesias en Valdebebas y la historia continúa. Y la leyenda también. Los cánticos del Bernabéu le hicieron vibrar, le mojaron los ojos y al final ha decidido quedarse.
Capitán número uno
La incógnita que Nacho vivía en su interior es que quería jugar más y veía que tenía por delante a Militao, a Rudiger y a Alaba. El alcalaíno piensa que ha hecho méritos para ser titular y no ser el cuarto central de la plantilla. En su fuero interno meditaba que muchas veces se quedaba como cuarta plaza porque Alaba y Rudiger vinieron libres al club blanco, arriesgaron mucho, soportaron mucha presión para no renovar en sus equipos y eso les daba también preferencia a la hora de las alineaciones.
Podía tener buena parte de razón en esta forma de pensar, pero ha disputado 43 partidos este año y lleva cinco temporadas con ese promedio. Es un titular sin sitio, uno de esos jugadores que no aparece en el once pintado en el mes de agosto por la prensa y que acaba jugando más encuentros que los nombres que aparecen pintados en los periódicos.
Así lleva 13 años en la primera campaña desde que Mourinho le hiciera debutar en Mestalla en un 3-6 colosal. Nunca ha sido titular fijo y siempre ha jugado como un titular.
Ahora, el adiós de Benzema le deja como primer capitán de la plantilla y ese reto le gusta. Un representante de la cantera al frente del club más internacional del planeta.
JAS le convence
José Ignacio Fernández Iglesias tiene 33 años y el Real Madrid ya le había propuesto renovar por una campaña más hace meses, un hecho importante porque a esta edad pocos jugadores son renovados por los clubes de más alto nivel.
Pero el defensa tenía un dilema y es que el Inter de Milán, que disputa la Champions en unos días, le ofrecía tres años de contrato. Masticaba también en su mente ofertas de Alemania y de la liga norteamericana.
Se lo ha pensado mucho. En casa se debatía si era bonito vivir una experiencia extranjera. La reciente llegada de su cuarto hijo ponía otro capítulo entre los puntos a estudiar con su mujer en la toma de la decisión definitiva.
Una reunión con José Ángel Sánchez, director general del Real Madrid, ha sido clave en su determinación de continuar. JAS, como se le denomina en el ambiente interno, le ha dicho que continuará siendo un hombre importante en la plantilla. No tenía que escuchar más.
La afición le encadena
La cumbre con la mano derecha de Florentino Pérez ha rematado una determinación que empezó a inclinarse por la continuidad en los últimos dos días al escuchar en el Bernabéu los cánticos de «¡Nacho quédate!» en la última jornada de Liga. La afición madridista le considera el máximo ejemplo de la cantera para que los chavales piensen que pueden llegar.
El éxito de Nacho en el Real Madrid comienza con un sacrificio enorme que ha forzado su disciplina para poder llegar a lo más alto y levantar cinco Champions. Su genética determinó que era diabético y desde niño tuvo que cuidarse mucho para superar ese problema.
Ese hándicap ha sido un listón muy grande para saltarlo siempre. Piensen ustedes lo que es jugar en el Real Madrid y cada vez que llega a un nuevo equipo de chavales lo primero que le dicen al entrenador es que Nacho es diabético. Con esa desventaja fue ascendiendo paulatinamente hasta llegar en 2011 a la primera plantilla del Real Madrid. El resto de la historia ya la conocen. Tres años después sigue en el Real Madrid y es primer capitán.
En estas condiciones, cuarto central, sin ser titular fijo, el madrileño ha vuelto a ser internacional y en estas últimas horas ha sido convocado por Luis de la Fuente. El titular sin sitio vive la cumbre de su carrera a los treinta y tres. Nacho, quédate.