Laporta se pliega a Tebas: el Barça y LaLiga van ahora de la mano

Hace unas semanas, en pleno caso Negreira y con el FC Barcelona lleno de problemas, Joan Laporta señaló a Javier Tebas –presidente de LaLiga– como principal enemigo de lo que él concibe como barcelonismo. «Ha tenido una actuación irresponsable, poco prudente y de una falta de profesionalidad evidente. Es intolerable», dijo.

«Tebas ya se ha sacado la careta, sigue con su obsesión y fobia al Barcelona. Quiere dominarlo desde la distancia», explicó en otra ocasión reciente. Laporta llegó incluso a acusar al presidente de LaLiga de presentar en la Fiscalía una «prueba falsa» para perjudicar al Barça en el caso Negreira.

Ese mismo Tebas al que se refería es el Tebas al que ahora se abraza Laporta en un movimiento clave en la liga española por mucho que no tenga una consecuencia instantánea o se vea en lo que es el terreno de juego.

Después de muchos dimes y diretes, acusaciones, empujones y críticas, Joan Laporta ha firmado la paz con LaLiga. Lo ha hecho por debajo de las alfombras, sin una explicación pública, con la intención de que nadie se enterara. Pero lo ha hecho. El Barça ha retirado la demanda contra LaLiga y CVC, el gran proyecto de Tebas que tenía a los culés (junto a Real Madrid y Athletic) en pie de guerra.

Traición por la espalda

Laporta ahora deja tirado a los blancos (y a los vascos) en esta batalla judicial y lo hace después de una especie de acuerdo con LaLiga. Que el Barça ahora desista del proceso judicial contra el denominado proyecto 'LaLiga impulso' se entiende por una razón muy simple: horas antes LaLiga había dado el ok al plan de viabilidad económica del Barcelona, un plan básico para acometer nuevos fichajes o inscripciones de jugadores, como la de Gavi, caso que LaLiga llevó a la justicia.

Así, el movimiento de Laporta es clave para entender el futuro tanto del Barça como de LaLiga. Laporta decide retirar la demanda contra Tebas por CVC y en un contexto también clave.

El Juzgado de Primera Instancia número 47 de Madrid declaró nula la asamblea en la que se aprobó el acuerdo entre LaLiga y CVC. El organismo presidido por Tebas se defiende con el argumento de que «no afecta a la validez y mantenimiento» de ese proyecto, el más importante de los que ha llevado a cabo LaLiga.

Cabe recordar que ese acuerdo con CVC viene a ser una millonaria inyección económica en los equipos de LaLiga (1ª y 2ª División) a cambio de que este fondo de inversión se lleve un porcentaje anual (en torno al 10 %) del resultado de la explotación de los derechos televisivos durante 50 años. A ese acuerdo se opusieron los tres equipos que no son Sociedades Anónimas, Real Madrid, Barcelona y Athletic, que tienen judicializado el caso al considerarlo ilegal. Los catalanes se bajan ahora de esa batalla judicial.

Así, Laporta viene a traicionar al Real Madrid, con quien ha trabajado mano a mano en este asunto los últimos dos años, para plegarse a los lícitos intereses de Javier Tebas, que ha pasado de ser el mayor demonio para el presidente culé (el que le quería quitar del cargo, el que hacía pruebas falsas contra ellos...) a ser una especie de socio.

Y es que esto ocurre después del decisivo sí de LaLiga al plan económico de viabilidad del Barça, lo más básico para Laporta en términos de supervivencia. Sin ese ok, el club azulgrana no podía apenas acometer fichajes e inscribirlos. Por no poder no podía ni inscribir a jugadores como Gavi o Araujo. Ese plan estaba también hecho por Laporta para traer a Messi, pero ese es otro tema principalmente porque el argentino ya ha dicho que allí no regresa.

Y así, de esta forma tan rápida y sin tampoco anuncios oficiales, es como Laporta ha pasado de ver a Tebas el hombre que más ponía en peligro su presidencia y la dignidad del Barça a abrazarse a él en una nueva etapa de su relación que podrá tener consecuencias en un futuro próximo.