Arandina, de la polémica al sueño: así es el rival del Real Madrid en la Copa del Rey

Cuando la Arandina Club de Fútbol se fundó en 1987, el Real Madrid ya contaba con 22 ligas, 15 Copas del Rey y seis Copas de Europa. En realidad es un club más antiguo, porque su nacimiento viene de la fusión de dos equipos anteriores: la Sociedad Gimnástica Arandina, el club histórico que iba a desaparecer, y la Unión Deportiva Aranda. Perdido en el infrafútbol español, en 2011 logró el ansiado ascenso a la ya extinta Segunda B, la tercera división del fútbol español. Desde entonces se ha convertido en un club ascensor, alternando subidas y bajadas de categoría.

Actualmente milita en el Grupo 1 de la Segunda RFEF, la cuarta categoría, aunque marcha último con apenas 10 puntos conseguidos en 18 partidos. Y entre viajes para jugar contra el Marino de Luanco o encuentros en casa ante el Racing Cantabria, se les ha colado una ronda de Copa del Rey ante el Real Madrid, en un escape de la realidad y el partido de sus vidas para todos los integrantes de este modesto club.

En la localidad de Aranda de Duero, en la provincia de Burgos, una ciudad de poco más de 30 mil habitantes a menos de dos horas en coche de Madrid, el fútbol ganará, por un día, un protagonismo inusitado, de unas proporciones mucho más grandes que las habituales. De hecho, el deporte más importante en la región es el balonmano, donde el Club Balonmano Villa de Aranda ha llegado a ser importante en primera división, aunque actualmente haya caído a la segunda categoría.

Que la Arandina se haya plantado en dieciseisavos de final de la Copa y se enfrente al Real Madrid no es una mera casualidad. Se necesita el factor suerte para que el sorteo te sonría con el actual líder de la liga, sí, pero para llegar aquí han tenido que realizar ya alguna proeza. En la anterior ronda eliminaron al Cádiz por 2-1, un equipo tres categorías por encima, y anteriormente ya se cargaron al Real Murcia, de una división superior.

Virginia Martínez, presidenta del club, comentó visiblemente emocionada tras el sorteo: «Que venga el Real Madrid a nuestra casa, que podamos recibirles, es un sueño hecho realidad. Es un hecho histórico; jugar contra un Primera División ya lo era y que sea el Real Madrid, el mejor equipo del mundo, pues para Aranda, la comarca, la ribera en sí, es hacer un sueño realidad». Les tocó la lotería antes de tiempo.

No es la primera vez que la Arandina aparece en los medios de comunicación. En 2018 se logró hacer un pequeño hueco mediático tras una increíble racha de 14 victorias consecutivas sin recibir un solo gol, aunque esa misma temporada, de forma cruel, se les escapó el ascenso en la final ante el Almería B.

La temporada pasada fue una de gran alegría para los socios de este modesto club, y es que se proclamaron campeones del grupo de Castilla y León de la Tercera RFEF, valiéndoles el ascenso. Además, por si fuera poco, lo lograron de forma invicta. Pero, pese a todo esto, pese a los logros y las gestas, el verdadero protagonismo de la Arandina en la escena pública española llegó por un caso completamente ajeno al fútbol.

La polémica

El pasado 2019, tres exjugadores de la Arandina –Carlos Cuadrado, Víctor Rodríguez y Raúl Calvo– fueron sentenciados a 38 años de cárcel por delitos de agresión sexual y contra la libertad sexual de una menor de 16 años. Al revisar la sentencia, el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León excluyó totalmente de responsabilidad al más joven, Raúl Calvo, y rebajó la condena a Cuadrado a cuatro años de cárcel y a Rodríguez a tres años al estimar que eran responsables de un delito de abuso sexual y no de agresión.

Los hechos, que ocurrieron en 2017 aunque la sentencia tardó dos años en ver la luz, sacudieron no solo al mundo del fútbol, sino también a una sociedad española que tenía reciente a los condenados de 'La Manada' en Pamplona.

El sueño

Ahora, la Arandina vuelve a estar en primera línea mediática aunque por una situación bien diferente, mucho más feliz. El Real Madrid de Carlo Ancelotti, y de Jude Bellingham o Vinicius Jr, visitará El Montecillo, como se conoce el estadio en el que disputan sus partidos.

Habitualmente de cinco mil espectadores, unas gradas supletorias especiales para este partido aumentarán la capacidad del recinto hasta los diez mil, en el evento más importante que ha organizado esta localización. Y aunque saben que lo normal será perder, y por goleada, la ilusión de las horas previas es un regalo que se llevan de por vida todos los integrantes de este club que, como tantos otros, intenta sobrevivir en las profundidades del fútbol español, lejos de fuegos artificiales, millones y regates imposibles, pero que dignifica la idea original de aquellos que crearon este deporte, hace ya más de un siglo, para potenciar el sentimiento de comunidad.