El Barcelona hace los deberes pero acaba pidiendo la hora ante el Barbastro

El Barcelona ha pasado a octavos de final de la Copa del Rey. Era algo que se podía suponer. Pero la actuación del conjunto azulgrana no ha sido nada buena. Marcó tres goles, pero el humilde Barbastro le puso las cosas muy difíciles y se quedó a tan solo un gol de mandar el duelo a la prórroga (2-3) y hacer soñar a toda la región del Somontano.

Había muchas ganas de Copa del Rey en el Somontano, región oscense en la que está afincada la UD Barbastro. El equipo aragonés venía de eliminar al Almería y confiaban en volver a lograr la machada ante otro Primera. Pero el reto este domingo para el Barbastro era mayúsculo. Enfrente tenía al Barcelona de Xavi que, aunque no esté en el mejor de sus momentos, es un equipo grande y siempre impone mucho respeto.

El Barbastro salió al encuentro con más corazón que cabeza. Y en partidos como este, donde la ilusión prima por encima de cualquier cosa, hay que intentar jugar con tranquilidad. Viendo que el equipo aragonés estaba nervioso, el Barça impuso su dominio desde el primer minuto y las ocasiones no tardaron en llegar. De primeras, el equipo catalán perdonó y se topó con el portero Fábrega. Pero esa falta de puntería se acabó pronto. El Barbastro aguantó 18 minutos y Fermín López aprovechó un gran pase raso de Raphinha para entrar al área desde segunda línea y poner el 0-1.

Con el marcador a su favor, el Barça siguió llegando a la meta defendida por Fábrega y Xavi no terminaba de entender por qué su equipo no había marcado más goles. En realidad, los culés anotaron un par más, pero Pulido Santana los anuló por fuera de juego y, como no hay VAR, a los jugadores, entrenadores y aficionados de Barbastro y Barça les toca creerse el criterio del trencilla canario. Y así se llegó al tiempo de descanso. El Barça dominando y el Barbastro 'relativamente' contento con el resultado. Todo era posible.

Tras el paso por vestuarios, Daniel Martínez, técnico del Barbastro, hizo un cambio para intentar buscar el gol del empate. Bautista le dejó su sitio a Soule. Pero el plan del entrenador local se fue al traste a los cinco minutos. El canterano culé Héctor Fort colgó un balón al área y Raphinha fusiló a Fábrega para poner el 0-2 y doblar la renta del Barça.

A pesar del resultado, la afición del Barbastro tenía muy claro que no iba a dejar de animar a su equipo. Los más de 5.000 aficionados estaban dispuestos a dejarse la voz y cantar con el corazón. Los ánimos surtieron su efecto y el Barbastro encontró el premio del gol. Adrià de Mesa aprovechó un saque de esquina para poner el 1-2 y dar algo más de emoción al choque.

El encajar ese inesperado gol puso nervioso a Xavi y el técnico egarense decidió sacar a Vítor Roque por Raphinha y a Íñigo Martínez por Christensen para intentar cerrar, de manera definitiva, el duelo. Y el Barbastro hizo lo mismo para buscar el gol de la igualada. Crespo y Reques para dentro; Carbonell y Kike al banquillo.

El encuentro no estaba para nada cerrado y Xavi siguió sacando más artillería del banquillo. Después de meter a Vítor Roque e Íñigo Martínez, el técnico culé seguía sin fiarse del equipo oscense y le dio minutos a Lewandowski y Gündogan.

El Barcelona estaba jugando con fuego y el Barbastro estaba dispuesto a seguir esforzándose hasta el final. Querían aprovechar la experiencia al máximo y no se iban a venir abajo en ningún momento. Y el final del duelo fue agónico. Lewandowski marcó el 1-3 de penalti y, poco después, fue el Barbastro el que volvió a recortar diferencias desde los 11 metros. En definitiva, el Barça acabó pidiendo la hora frente a uno de los equipos más humildes de nuestro país.