Intrahistoria de una marcha atrás: los motivos de que Xavi haya decidido quedarse en el Barcelona

El pasado 27 de enero, después de una derrota como local (3-5) ante el Villarreal, una que le despedía prácticamente de la lucha por la Liga y que completaba el ´mes horrible´ del Barcelona, con eliminación en Copa del Rey y contundente derrota ante el Real Madrid en la Supercopa de España mediante, Xavi Hernández anunció su decisión de dejar el equipo a final de temporada.

El Barcelona venció la Liga 2022/23, una de gran mérito, en base a su solidez defensiva. Los datos son claros: el equipo tan solo encajó 20 goles en la totalidad del campeonato, un dato de mucho valor. Sin embargo, viéndoles jugar, no transmitían ser ese muro infranqueable, como podía ser el Atlético Madrid de Simeone en 2014 (que encajó 26 tantos). Las individualidades eran potentes (Araújo, Christensen o Ter Stegen realizaron una fantástica campaña), pero la estructura colectiva no era tan potente. De hecho, cuando el Barça salía a Europa y la calidad media era mayor, se veían penalizados.

Este verano, buscando dar un paso más en su regreso a la máxima élite, el Barça decidió invertir en calidad ofensiva. Si la defensa ya está funcionando , mejor trabajar en la otra parcela del campo: llegaron jugadores de renombre como Joao Félix, Gündogan e incluso defensas de marcado carácter ofensivo, como Joao Cancelo. Llegado ese fatídico mes de enero, las sensaciones eran que no solo no habían logrado esa evolución ofensiva, sino que en el camino por buscar eso habían perdido la solidez defensiva.

Con una presión ambiental atronadora y unos resultados que no correspondían a la institución, Xavi decidió anunciar su adiós. Buscando aligerar el ruido y mejorar el ambiente interno.

Funcionó. Al menos en gran parte.

Desde ese encuentro ante el Villarreal, el Barça ha sumado 26 puntos de 33 en Liga. Ocho victorias, dos empates y tan solo la derrota ante el Real Madrid. En Champions eliminaron al Nápoles y estaban cerca de hacerlo ante el PSG, antes del derrumbe provocado por la expulsión de Araújo. Más allá de resultados, incluso han recuperado su solidez atrás. Antes de visitar el Bernabéu, solo habían encajado 5 goles en 10 encuentros, incluyendo seis porterías a cero de manera consecutiva.

Aunque el Barça va a acabar la temporada a cero en lo que a títulos se refiere, algo indudablemente muy por debajo de las expectativas, Xavi sí podría pensar que ha recuperado el rumbo del club en estos últimos meses, acariciando las semifinales de la Champions y perdiendo solo un partido, en el tiempo de descuento en el Bernabéu, en Liga. Tanto Xavi como Laporta avisaron meses atrás que no ganar tendría consecuencias, pero sin embargo la temporada a cero finalmente no va a ser motivo para prescindir del entrenador. Xavi seguirá como técnico de la entidad blaugrana. ¿Por qué?

Los motivos

En la rueda de prensa que convocó para explicar su decisión, el entrenador afirmó que «el proyecto no está acabado». Quizás, como se mencionaba, Xavi podía tener esa sensación en enero pero los últimos meses, pese a la ausencia de títulos, le han hecho cambiar la percepción. Xavi se vuelve a ver con posibilidades de competir. Joan Laporta comunicó que «el proyecto ya es ganador». Ambos creen que queda cuerda para rato.

Por otro lado, quizás el gran valor que ha otorgado Xavi al Barcelona es el profundo barcelonismo que siente. Eso nadie lo puede poner en duda. Siente y sufre el club. «Intento hacer lo mejor para el club» dice el entrenador. Él no se ve en ningún otro lado, y sabe que en ningún otro lado le aceptarán y le acogerán como en Barcelona.

El club, por su parte, con el agua al cuello financieramente, sabe que tampoco opta a grandes nombres en el mercado. No hay demasiados entrenadores disponibles que casen con el estilo Barça y estuvieran dispuestos a aceptar tomar el mando de la entidad. Manteniendo a Xavi, se ahorran un problema.

El entrenador confía en que la vuelta al Camp Nou pueda significar retomar la competitividad del año pasado. Para alguien que construye tanto su discurso en base a su unión con la grada, el haber tenido que jugar lejos de casa, en un estadio más frío y distante como Montjuic, siente que no les ha beneficiado. Volver a casa siempre es bueno.

Xavi, Laporta y Deco han tomado una decisión difícil y que no va a estar ajena al escrutinio público. Decidiendo quedarse y dar marcha atrás, Xavi espera que el futuro albergue una etapa de gloria y muchos éxitos pero, si las cosas no van bien, podría dilapidar su reputación y su consideración como leyenda culé. Ha decidido tomar este salvoconducto para intentarlo, una vez más, con el equipo de su vida. Ahora está por ver si el amor le ha ganado la batalla a la razón.