El fracaso del mercado de fichajes del Barcelona: lo que prometió Laporta y lo que ha terminado siendo
El presidente azulgrana estuvo la recta final de la pasada campaña alimentando los rumores de algunos grandes nombres y al final no ha llegado ninguno
La infinidad de negocios cuestionables que está llevando a cabo Laporta para sanear la economía del Barça
El mercado de fichajes ya ha terminado y el Barcelona ha sido una de las grandes decepciones del verano. El presidente del club, Joan Laporta, hizo declaraciones muy optimistas en los meses previos a que se abriese la ventana de fichajes e incluso en los primeros compases en los que estuvo abierta. El abogado catalán presumió de una situación financiera que finalmente ha resultado no ser verdad y sus palabras se le han vuelto en contra.
Hablaban en la zona noble del club azulgrana sobre todo de Nico Williams, gran sensación de la temporada pasada y que se confirmó como una estrella en ciernes durante la Eurocopa. El extremo del Athletic era el anhelo de Laporta para reforzar su delantera y las palabras de Tebas sobre el asunto le dieron esperanzas. «El Barça está cerca de fichar a Nico», aseguró el 12 de julio el presidente de LaLiga.
No iban ni 15 días de mercado de fichajes y el plan del Barcelona parecía claro. Dani Olmo y Nico Williams debían ser los refuerzos, los grandes jugadores en plantilla –como Gündogan– tenían que continuar y les tocaba dar salida a futbolistas con los que no se contaba para aligerar la masa salarial y entrar en la regla del 1:1, algo que finalmente no han conseguido.
Se las prometían felices en la Ciudad Condal, con Hansi Flick como nuevo entrenador y la posibilidad de incorporar grandes futbolistas a la plantilla para dar el salto de calidad necesario a un equipo que hace años que dejó de estar entre los colosos europeos. Sin embargo, Laporta se volvió a chocar de frente con la realidad y vio imposible cumplir las promesas que hizo. Incluso la de estar en la regla 1:1, algo que repitió y repitió y que tampoco logró hacer.
Un verano torcido
Fueron pasando los días y esos refuerzos prometidos no llegaban a Barcelona. Pau Víctor, procedente del Girona por algo menos de tres millones de euros fue la única incorporación de julio. Las informaciones sobre Nico Williams se iban sucediendo, pero finalmente el de Pamplona confirmó que se quedaba en el Athletic para jugar competición europea con su hermano. Fue ahí cuando el Barça activó la opción Dani Olmo, al que anunciaron a principios de agosto.
La directiva azulgrana siguió deslizando que firmar a Williams también era posible, pero pronto se descubrió el verdadero motivo por el que el internacional español no vio con buenos ojos recalcar en la entidad catalana. No estaba garantizada la inscripción. Eso lo experimentó Dani Olmo, que está inscrito hasta el 31 de diciembre por la lesión de 'larga duración' de Christensen y que no habría podido jugar en el club sin esa carambola.
El Barça sacó a 13 jugadores: Mikayil Faye, Julián Araujo, Chadi Riad, Marc Guiu, Estanis Pedrola, Sergiño Dest , Ilkay Gündogan, Sergi Roberto, Marcos Alonso, Vitor Roque, Oriol Romeu, Álex Valle y Clément Lenglet, pero ni por esas logró conseguir el margen necesario para inscribir al ex del Lepizig, por lo que haber firmado a dos jugadores habría sido imposible.
De estas marchas destaca sobre todo la de Gündogan, mejor futbolista azulgrana de la temporada pasada y al que han tenido que regalar ya que no podían pagarle. Además, la de Lenglet resulta interesante, pues su adiós era fundamental para cuadrar cuentas y solo han podido sacarlo cedido al Atlético de Madrid en lo que parece más un favor del club colchonero que un gran deseo por contar con el central francés. Dos tareas que tenía Laporta y ambas resueltas con suspenso.
Los jugadores que sonaron
A pesar de su mala situación económica, hasta el último día han seguido sonando nombres para el extremo izquierdo. Laporta tenía entre manos un acuerdo con Nike y otro con WhiteBIT, una empresa ucraniana dedicada a las criptomonedas, por si encontraba alguna opción. En cambio, pronto vio que aun así no tenía dinero tampoco para Rafael Leao ni para Federico Chiesa, la opción más económica que barajaron en los últimos días de mercado.