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Robert Lewandowski en el pasado Clásico disputado en el Santiago Bernabéu

Robert Lewandowski en el pasado Clásico disputado en el Santiago BernabéuEuropa Press

El Barça se planta con su grada de animación: les ordena pagar los 21.000 euros de multa acumulados

El Barcelona ha dicho 'basta' con su grada de animación y ha optado por tomar medidas para frenar de una vez el mal comportamiento de algunos de los hinchas que se ubican en esa zona del campo.

El club azulgrana ha comunicado a los cuatro grupos de animación del Estadio de Montjuic (Penya Barcelonista Almogàvers, Penya Barcelonista Front, Penya Barcelonista Nostra Ensenya y Supporters Barça) que deberán hacerse cargo de las multas acumuladas por los incidentes que ocasionaron a lo largo de la temporada pasada en los próximos 15 días hábiles. La suma de las multas asciende ya a 21.000 euros.

El precio a pagar de cada aficionado será proporcional a su presencia y participación en la grada. Además, la cosa no se quedará ahí, ya que a partir de ahora, si vuelve a haber un incidente que termine con un nuevo expediente sancionador, la grada se cerrará para el siguiente partido. Llama la atención que este aviso se haya dado tan sólo unos días antes de que el Espanyol visite el hogar provisional del Barça (habitualmente uno de los partidos más conflictivos de la temporada).

Esta medida tomada por el conjunto culé se puede ver desde diferentes prismas. Por un lado, se puede considerar una política de tolerancia cero a grupos radicales y a actitudes racistas o xenófobas, ya que en el primer mandato de Laporta, en su llegada en 2003, se erradicó a los Boixos Nois del Camp Nou y ahora, durante el segundo, la junta directiva del presidente podría estar tratando de evitar que se repitan actitudes violentas y discriminatorias en su propia grada de animación.

Sin embargo, también se puede tomar como 'respuesta' a los cánticos «Barça sí, Laporta no» de esta grada en contra de la directiva actual, que ya empiezan a ser comunes en el Lluís Companys. Estas protestas sumadas a los problemas económicos que atraviesa actualmente el club catalán podrían ser otra de las razones por las cuáles ahora, el presidente pasa factura a los cerca de 600 socios que conforman la zona de animación, exigiéndoles el pago correspondiente a los múltiples expedientes abiertos que se han ido ganando por parte de Liga, UEFA y Generalitat.

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