El Bernabéu, el gran apoyo de Mbappé en el momento más duro de su carrera

Hay quien cree que Kylian Mbappé se quedó en Qatar tras perder la final de la Copa del Mundo 2022 el 18 de diciembre. Esa fue la última gran exhibición del delantero francés, que estuvo a nada de remontar él solo una final que su país tenía completamente perdida ante Argentina. Del 2-0 al 2-2 en tan solo tres minutos, forzó nuevamente el empate en la prórroga (3-3) y metió su penalti en la tanda.

Los focos se los terminó llevando Leo Messi por conseguir al final la Copa del Mundo que le faltaba. A la quinta logró el título más preciado del fútbol y se llevó toda la gloria, pero el partido de Mbappé no debe caer en el olvido. Fue su confirmación como mejor jugador del mundo, aunque desde ese día nada ha vuelto a ser igual y su fútbol se quedó en Qatar para desgracia del Real Madrid.

Precisamente desde el país de Oriente Medio presionaron por tierra, mar y aire para que Mbappé se quedara en el PSG. El astro galo aguantó todo el ruido y esta vez cumplió su promesa. Aguantó el año y medio que le quedaba en París y puso rumbo a la capital de España para hacer realidad su sueño de jugar en el rey de Europa. Eso sí, no llegó como la gran estrella, puesto que Vinicius es ahora la gran referencia del equipo blanco.

Por tanto, Kylian se ha visto obligado a dejar la banda izquierda que ocupaba en el PSG –sitio de Vinicius en el Madrid– y desplazarse a la posición de delantero centro, donde todavía no está convenciendo. A pesar de llevar 10 goles y dos asistencias en 19 partidos con la elástica blanca, el francés atraviesa una crisis a la que el Bernabéu quiere poner fin.

Llevar en volandas a Mbappé

La afición del Real Madrid siempre es exigente y no duda en trasladar a los suyos su decepción cuando no les gusta lo que ven. Mbappé, que insistimos en que no tiene malos números, no está siendo ese futbolista diferencial. Apenas entra en juego con el balón, está espeso y sin ideas y sobre todo se le ve falto de confianza. Por eso ha entendido la afición madridista que lo que toca es apoyarle y tratar de levantarle el ánimo.

«Ha marcado un gol muy importante para controlar bien el partido y ha creado ocasiones en la segunda parte siendo muy activo», dijo en rueda de prensa Carlo Ancelotti. «Creo que la afición entiende más que nadie el momento del equipo y de los jugadores. Mbappé lo podía hacer mejor contra el Liverpool y lo han apoyado como era justo. He sentido alivio porque marcó. Para él también lo ha sido, con un gol espectacular con una ejecución fantástica. Su partido ha sido muy bueno», concluyó.

La de Ancelotti fue la confirmación de que Mbappé necesita el cariño de la afición del Real Madrid. No está pasando un buen momento y el Bernabéu, al igual que es capaz de remontar partidos imposibles, puede ser también un punto de inflexión para el galo, que además mientras Vinicius esté fuera jugará por la izquierda. Será puntual, pero puede servirle para recuperar confianza y volver a ser el mejor futbolista del mundo. Talento tiene de sobra para hacerlo desde cualquier posición.

Al final, la gran realidad es que nadie en el Real Madrid está ahora a su mejor nivel, pero aun con eso, el equipo de Ancelotti tiene la posibilidad de ponerse líder en el campeonato doméstico y remediar su situación en Champions. Los títulos se deciden en la segunda parte del año y todos confían en que ahí se verá lo mejor del equipo y de los grandes futbolistas. Mbappé no se ha olvidado de jugar a la pelota y lo quiere todo. Ansía la Champions y también el Balón de Oro, algo que le reclaman desde su país. El Real Madrid es el mejor lugar para conseguirlo y la afición está con él. Ni caso a quienes le tachan del «nuevo Hazard».