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Rüdiger y Militao, con el trofeo de la Copa del ReyAFP

El dilema de Ancelotti tras el regreso de Militao y el buen hacer de Rüdiger con Haaland

La duda del técnico está en el centro de la defensa: después de que el alemán 'secara' al noruego, ¿le acompañará el brasileño o Alaba?

Carlo Ancelotti tenía claro que Eder Militao era su defensor fetiche, el defensor al que había que sacar siempre por seguridad. El brasileño ha jugado todos y cada uno de los partidos en los que ha estado disponible y únicamente el italiano no le convocó por decisión técnica en el último duelo del pasado año en Valladolid.

Fijo en cada partido, titular siempre y aguantando la totalidad de los minutos, Militao llegó a consagrarse y ganarse la vitola de mejor central del mundo. Al menos competía por ese honor. Justo cuando más merecía el calificativo fue cometiendo errores groseros en Gerona, San Sebastián... y estaba sancionado en la ida del partido ante el City.

En el fútbol entra muchas veces circunstancias que no van con el propio jugador. Militao vio amarilla en el encuentro ante el Chelsea de hace ya un mes y eso le obligaba a perderse el partido ante el City en el Bernabéu. La baja daba miedo porque el brasileño venía siendo el mejor y porque el rival era Haaland. Pero Rüdiger, su sustituto, secó de tal manera al noruego que tiene que jugar ahora en Mánchester.

Así lo confirmó Ancelotti. Rüdiger jugará. ¿De titular? «Te digo más, empieza el partido», contestó a la prensa. Es decir, que sí. Y esto supone que una duda se resuelve, pero queda otra: ¿quién será su compañero en defensa

El Madrid ha vivido esta temporada unos vaivenes en defensa que ha ido superando gracias a su buena gestión en la línea de atrás. Se ha lesionado varias veces Alaba, Rüdiger también y en otros momentos no llegaba a convencer, apareció la figura de Nacho como salvadora... Ha habido contratiempos y soluciones porque para eso se cubrió bien la parte de los centrales.

Rüdiger fue la sombra de Haaland en el partido de ida ante el CityAFP

El pasado verano el Madrid fichó a Rüdiger. Venía entonces el equipo blanco de una exitosa temporada en la que Alaba y Militao habían formado una gran pareja de centrales. Se discutió si Alaba se podría mover al lateral izquierdo, pero allí estaba Mendy, también lesionado en varios tramos de este curso, entre ellos el actual que es el más decisivo.

Esos recursos le han venido muy bien a Ancelotti, que ha ido moviendo piezas aunque generalmente han ido jugando Alaba y Militao juntos. Sin embargo el austriaco se lesionó en Anfield, salió Nacho y el canterano arregló la papeleta. Y mientras tanto Militao seguía jugando hasta que tuvo su ausencia en Champions.

El éxito de Rüdiger ante Haaland

Rüdiger fue una de las grandes figuras del partido de ida ante el City. El defensor alemán dio un clinic de cómo se puede parar a Haaland, algo que no ha conseguido nadie hasta entonces. Le hizo un marcaje férreo, casi obsesivo (en el mejor significado de la palabra) que derivó en uno de los peores partidos del noruego: no se le fue en ninguna jugada, estuvo 90 minutos encima de él y cada vez que tocaba el balón Haaland ya estaba ahí Rüdiger siendo su sombra continua.

Con ese partido costaba pensar que el alemán pueda volver al banquillo. No hay dos partidos iguales, seguramente Guardiola trabaje en cómo superar ese marcaje tan férreo, pero cuando un futbolista hace de forma tan brillante su trabajo cuesta pensar en que su jefe (en este caso Ancelotti) le vaya a mandar al banquillo.

Esa es la duda. Militao vuelve tras su sanción y era más que fijo para Ancelotti. Si salió bien la pareja Alaba-Rüdiger en la ida, ¿conviene sacar en la vuelta a Militao? Si juega el brasileño, ¿tiene que ser Rüdiger, el hombre que 'secó' a Haaland, el que siga marcando al noruego? ¿O es mejor mandar a Alaba a la suplencia?

Militao se perdió el partido de ida ante el City por sanciónAFP

El debate está abierto en el seno del Real Madrid para el partido más importante de la temporada. El encuentro de ida dejó una igualdad tremenda para el de vuelta, a disputar este miércoles en Mánchester. Y ahí se la juega Ancelotti más que por su futuro por su crédito como gestor de decisiones tan difíciles y decisivas. Tendrá que tomar una decisión difícil en su defensa y si le sale bien será su éxito total, pero como le salga mal todos le señalarán. Así es el fútbol.