Atlético de Madrid 3-2 Feyenoord
El Atlético saca su orgullo y consigue un trabajado triunfo ante un consistente Feyenoord
El conjunto rojiblanco saca adelante un partido complicado ante un gran Feyenoord gracias a una nueva exhibición de Morata y Griezmann
A este Atlético de Madrid le van las remontadas. Después de la conseguida en Liga ante el Cádiz el pasado domingo, este miércoles, el conjunto rojiblanco ha vuelto a firmar una remontada espectacular en el Metropolitano. Los rojiblancos han conseguido superar a un resistente Feyenoord que no le puso las cosas nada fáciles y suma sus tres primeros puntos de la temporada en la máxima competición europea (3-2).
El ambiente en el Cívitas Metropolitano era increíble. Y no es para menos. El Atlético debutaba ante su gente en Champions y querían, a toda costa, conseguir el primer triunfo en fase de grupos y sumar los tres primeros puntos más en su casillero.
Por su parte, el Feyenoord también quería la victoria. Los pupilos de Arne Slot habían ganado por 2-0 en la jornada inaugural al Celtic de Glasgow y una victoria en el feudo rojiblanco le dejaría en muy buena posición para lograr el pase a octavos.
El inicio de partido de ambos conjuntos fue intenso. Y se pudo ver, inmediatamente, las intenciones de los dos equipos. El Feyenoord quería ser protagonista con balón y el Atlético decidió esperar, algo que le perjudicó en los primeros minutos. Los rojiblancos no estaban muy precisos con balón y en el minuto seis llegó el primer mazazo para los locales.
El Atlético de Madrid perdió un balón en el centro del campo y el Feyenoord no perdonó. El delantero nipón, Ueda, aprovechó un gran pase filtrado y, con ayuda de Mario Hermoso, introdujo el balón en la portería de Jan Oblak.
Reacción inmediata
Sin embargo, el hecho de encajar un gol tan tempranero no perjudicó al Atleti. Al contrario. Los rojiblancos tardaron muy poco en celebrar el gol del empate. Álvaro Morata definió a las mil maravillas y, tras revisión de VAR, el colegiado francés dio validez al gol del madrileño, que está en un momento de forma tremendo. Todo lo que toca acaba en gol. Normal que Luis de la Fuente confíe tanto en él.
Con el empate en el marcador nadie quería cometer ni el más mínimo error. Al Atlético le sentó estupendamente empatar tan pronto y se fue a por el segundo. A los del 'Cholo' Simeone no les venía bien el empate. Estaba siendo un auténtico partidazo.
Gracias al apoyo de su afición, pasado el minuto 20 del primer acto, el Atlético parecía otro. Simeone estaba inquieto en la banda y no paraba de dar indicaciones a sus jugadores. Los rojiblancos pasaron de ser un equipo vulgar y blando a uno temible y vertical.
El Feyenoord no se viene abajo
El Feyenoord trataba de romper la primera línea de presión del conjunto colchonero, pero los neerlandeses no se estaban finos a la hora de dar el último pase. Se estaban viendo superados por la tremenda presión impuesta por el Fondo Sur del conjunto madrileño. No obstante, el Feyenoord es un equipo que se las sabe todas.
Cabe recordar que es el campeón neerlandés y está en la Champions por algo. Y, en el minuto 34, la defensa rojiblanca se durmió en los laureles y Hancko remató libre de marca para anotar el 1-2. Los cerca de 4.000 aficionados del conjunto visitante volvieron a hacerse notar en el Metropolitano. Y no era para menos. Estaban consiguiendo un gran resultado.
El segundo gol neerlandés no le sentó nada bien al conjunto local, pero el Atleti es un equipo con mucha garra y que no se rinde con facilidad. Cuando todo el mundo contaba con marcharse al descanso perdiendo, Griezmann sacó la magia y anotó un gol psicológico importantísimo para los locales.
Reanudación fulgurante
Tras el paso por vestuarios, el Atlético tomó nota del mal inicio que tuvo en el primer acto y se fue a por el Feyenoord desde el primer segundo. Tal fue el empuje de los atléticos que en el minuto 47, Álvaro Morata recogió un gran pase de Nahuel Molina para marcar el 3-2 y su doblete particular.
El Atlético quería esta victoria sí o sí. Y así se lo tomó el conjunto rojiblanco. Buena parte de la clasificación para los octavos pasaba por ganar los duelos directos al Feyenoord, un equipo que se merece respeto, ya que es el vigente campeón de la Eredivisie (liga holandesa).
A pesar de ir por debajo en el marcador, el Feyenoord no se iba a rendir tan fácilmente. Los neerlandeses estaban generando mucho peligro por las bandas y la afición rojiblanca temía por el resultado, pero los del 'Cholo' Simeone estaban muy cómodos con el balón en los pies.
El único problema del Atlético en la segunda mitad estaban siendo algunos desajustes defensivos. El club del pueblo, tal y como es conocido el Feyenoord, es un conjunto extremadamente vertical y llegaba con facilidad a la portería defendida por Jan Oblak, pero el esloveno estaba neutralizando todo.
Al conjunto de Rotterdam, una de las ciudades más importantes de los Países Bajos, se le empezaba a acabar el tiempo. Tuvo su momento con el 1-2, pero enfrentarse al Atleti en el Metropolitano requiere de una tremenda concentración. Los últimos minutos fueron holandeses, pero el triunfo fue del Atlético, que consigue los tres primeros puntos de la temporada en Champions.
Ficha técnica
Feyenoord 2: Wellenreuter; Geertruida, Trauner (Nieuwkoop, min. 74), Hancko, Hartman; Wieffer (Lingr, min. 74), Zerrouki (Jahanbaksh, min. 78), Timber; Stengs, Ueda (Minteh, min. 59), Paixao.
Goles: 0-1 Hermoso (min. 6 p.p); 1-1 Morata (min. 12); 1-2 Hancko (min. 34); 2-2 Griezmann (min. 45+3); 3-2 Morata (min. 47)
Árbitro: François Lexetier (Francia). Amonestó a los locales Azpilicueta (min. 33), Saúl (min. 41), Morata (min. 45+1), Lino (min. 56) y a los visitantes Stengs (min. 53)
Estadio: Cívitas Metropolitano (Madrid)