Las claves tácticas de la final: el Dortmund contra Kroos y Mendy ante Sancho
Los de Edin Terzic deberán cuidar mucho a qué altura sitúan su bloque en fase defensiva, mientras el Real Madrid intentará frenar las rápidas transiciones rivales
Ancelotti, el triunfo de un camaleón incombustible
Una final de la Champions League es un partido muy peculiar, donde el miedo pesa más que en cualquier otro escenario. Tener la gloria tan cerca, al alcance de la mano, lleva a los equipos a desmelenarse menos y jugar en sus cabezas más con la idea de no encajar que de marcar un gol más que su rival.
Entrando en la parte emocional y psicológica, sería normal que al Borussia Dortmund le afectasen mucho más todos esos factores, debido a la inexperiencia a estas alturas de la competición, que a un Real Madrid que ha hecho del ganar un hábito. En la plantilla blanca sobran los jugadores que ya han estado en esta instancia con anterioridad y que son capaces de aportar pausa y templar los ánimos cuando todo llama al descontrol y el pánico escénico.
Entrando en lo futbolístico, en lo que se puede esperar en el partido, y pese a que el Borussia Dortmund es un equipo que ataca mejor que defiende, lo normal sería que los alemanes cediesen el balón, replegasen líneas y buscasen amenazar a la contra. Tal como hicieron en la eliminatoria ante el PSG en semifinales.
Parar a Toni Kroos
Se abre aquí una curiosa ecuación para el Borussia Dortmund, de difícil solución. Si optan por atrasar líneas y defender el espacio, inevitablemente se genera espacio y tiempo para el Real Madrid en salida de balón, algo que Toni Kroos, en su último partido con el club, puede aprovechar para machacarles.
El alemán, uno de los mejores centrocampistas de este siglo, a partir de su habitual lateralización en la banda izquierda, puede tener tiempo y espacio para dictar las posesiones, lanzar a compañeros y encontrar jugadores a espaldas de las líneas rivales. No es el Dortmund un equipo que defienda especialmente bien el espacio entre líneas, en particular el que se abre entre la línea defensiva y el doble pivote. Si Kroos puede filtrar con comodidad, y Bellingham, Rodrygo, Vinicius y compañía atacan la última línea de cara, los de Ancelotti tendrán la victoria en su mano.
Si por el contrario, con el objetivo de complicarle la vida a Toni, el Dortmund decide adelantar un poco las líneas, ser un bloque más presionante, irremediablemente tendrán que dejar espacios a la espalda de la defensa. Unos espacios que los rapidísimos Vinicius y Rodrygo pueden castigar ante una zaga, la alemana, que no se caracteriza por la velocidad recuperando metros. Ya tienen la reciente muestra de la ida de las semifinales, donde Vinicius machacó a la espalda del central surcoreano Kim Min-Jae en Múnich.
Ese es el problema que deben afrontar los de Edin Terzic: ¿priorizar el balón o el espacio? Entre medias, Toni Kroos.
Sancho contra los laterales del Madrid
El Dortmund basó gran parte de su éxito ante el PSG en la capacidad de desplegarse tras robo y amenazar a la contra, con Julian Brandt gestionando los primeros pases y lanzando a los veloces Jadon Sancho y Karim Adeyemi, que causaron estragos, especialmente el inglés, a la zaga parisina.
Pero Jadon Sancho se va a medir a Ferland Mendy (no es descartable un cambio de bandas en los extremos del Dortmund, algo bastante habitual en ellos), que es uno de los mejores laterales defensivos, sino el mejor, del mundo. Ferland tiene en su haber un gran reguero de víctimas, de Mohamed Salah a Phil Foden pasando por Bernardo Silva. Del ganador de ese duelo entre inglés y francés (o entre inglés y español, si se mide a Carvajal) dependerán muchas de las opciones de victoria del cuadro alemán.
Si Sancho logra que su equipo pueda transitar y amenazar al espacio, el Dortmund tendrá acercamientos a la portería de Thibaut Courtois, y ya dependerá de su acierto si marcan o no. Si, en cambio, es anulado, el Dortmund tendrá muy difícil hacer daño y dependerá en exceso del juego de espaldas del espigado delantero, Niclas Fullkrug, para poder instalarse en campo rival.
Una final es un partido con multitud de detalles, algunos se pueden controlar y otros no, pero es en estas dos figuras, Kroos y Sancho, donde se puede intentar adivinar por donde irán los tiros de la gran final. El que imponga su guion de partido acercará a su equipo a la victoria.