Ferran Torres lidera al Barça con un hat-trick al Betis para evitar una nueva hecatombe en Liga

El Barcelona no está dispuesto a rendirse tan fácilmente. O al menos eso ha demostrado en el Benito Villamarín. Empezó ganando 0-2 gracias a un doblete de Ferran; vio cómo el exmadridista Isco sacó su magia para empatar el duelo; y espabiló justo a tiempo para sumar un nuevo triunfo fuera de casa y mantener la distancia de siete puntos con los puestos de cabeza (2-4)

Después de caer estrepitosamente en la final de la Supercopa contra el Real Madrid y de sufrir más de la cuenta para eliminar a Unionistas de Salamanca, el Barcelona viajaba a Sevilla para enfrentarse al Betis, uno de esos equipos que ha hecho de su estadio un fortín.

Ni Real Madrid, ni Girona ni Atlético de Madrid fueron capaces de llevarse los tres puntos del Villamarín. Y el Barça quería ser el primero en hacerlo y convertirse en el único equipo en llevarse los tres puntos de estadios inexpugnables.

El inicio de partido fue intenso. El Betis, empujado por su afición, quería dar el primer susto de la tarde al Barça, pero el equipo de Xavi supo frenar el ímpetu local y se hizo con el control de la posesión, aspecto que le permitió acercarse con peligro a la portería de Rui Silva. Los pupilos de Manuel Pellegrini lo intentaban a la contra, pero les faltaba algo más en los últimos metros.

Lejos de ser un equipo incisivo, al Barça se le veía algo más metido en el encuentro. Estaban llegando con mucha facilidad al área del Betis y en un despiste de la zaga local llegó el primer gol blaugrana. En el 21', Pedri puso el balón al área y allí apareció Ferran para provocar el delirio de los aficionados presentes en el Villamarín.

El encuentro se le ponía muy de cara a los de Xavi. Necesitaban un triunfo como el comer. Y antes del descanso, Lewandowski anotó dos goles más, pero el polaco estaba ligeramente adelantado y esos tantos no subieron al marcador.

El Betis reacciona gracias a 'Magic Isco'

Tras el paso por vestuarios, Pellegrini decidió cambiar su plan de juego y así ser más directo de cara a puerta. Borja Iglesias y Nabil Fekir al campo; Assane Diao y Willian José al banquillo. Toda una declaración de intenciones por parte del preparador chileno. Sin embargo, ese plan se fue al garete. Doblete de Ferran en el 48' y partido casi encarrilado para el equipo azulgrana. Sí. Casi. Porque este Barça es capaz de lo mejor y de lo peor.

El ir perdiendo 0-2 provocó el despertar del Betis. Cuando se vio con el agua al cuello, el conjunto verdiblanco decidió despertar. Isco, el mago del Betis, se echó el equipo a la espalda. El de Arroyo de la Miel necesita muy poco para marcar y primero se sacó un latigazo que se coló por la escuadra de la meta de Iñaki Peña – Araujo la sigue buscando –. Y, cuatro minutos después, el malagueño estuvo rápido para picar un balón suelto y meter en el partido a un Betis que estaba desnortado, muerto y falto de ideas.

Con 2-2 en el marcador, el encuentro volvió a ser parecido a lo que se estaba viendo antes del primer gol de Ferran. Pero el Betis estaba mucho más vivo, con más ganas y dispuesto a aguarle la fiesta al equipo culé. Entre la velocidad de Isco, Fekir y Luiz Felipe nacía el peligro bético. Y por cosas como estas, el fútbol es un deporte tan imprevisible y tan bonito.

El partido se estaba jugando más en el campo del Barça que del propio Betis. El conjunto verdiblanco sabía que tenía una oportunidad inmejorable para ganar al Barça en el Villamarín. Para encontrar el último triunfo en casa del conjunto bético contra el azulgrana hay que remontarse al 29 de marzo de 2008.

Sin embargo, el fútbol se volvió a cebar con el Betis. El Barça aprovechó el cansancio de los futbolistas verdiblancos y entre Joao Félix y Ferran Torres cerraron un encuentro que se les había puesto muy difícil. Nadie sabe muy bien la razón, pero el conjunto andaluz no sabe cómo aprovechar sus buenas rentas cuando estos dos equipos se enfrentan. En definitiva, triunfo importantísimo para un Barça que sigue con vida en esta Liga.