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Hansi Flick durante el partido de Champions ante el MónacoGTRES

La verdadera realidad del Barcelona vuelve a aparecer aunque Flick no pone las escusas de Xavi

Tan solo han bastado seis partidos oficiales para comprobar que el Barcelona cuenta con dos versiones. Por un lado está la de Liga, en la que ha sumado un 15/15 espectacular que le ha aupado hasta el liderato, y, por el otro, aparece la de la Champions League, donde se ha visto que el equipo no está hecho para competir en Europa.

La inesperada derrota ante el Mónaco en el debut en la nueva Champions ha vuelto a evidenciar que de nada sirve ser competitivo en el torneo liguero si luego vas a Europa y caes a las primeras de cambio contra un rival claramente inferior. Y eso, en un club de la exigencia del Barcelona, se considera como algo inaceptable y que deja en mal lugar a la dirección deportiva.

Esa es su verdadera realidad. En Liga todo son sonrisas, pero en Europa vuelven los fantasmas. Y es que el Barcelona, más allá de la irrupción de Lamine Yamal o la capacidad anotadora de Robert Lewandowski, por poner ejemplo, no tiene plantilla para competir por cosas importantes. Eso es algo que se ve desde lejos. Para triunfar en Europa hay que ir todos a una y remar en la misma dirección cuando las cosas vienen mal dadas.

Eso sí. Hay una diferencia radical respecto a la temporada anterior. Y esa está en el banquillo. Hansi Flick asume que es lo que hay. El alemán no se ha quejado en ningún momento y eso dice mucho de su categoría como entrenador. Tiene muy claro que los errores dependen de él y no va a poner excusas que cambien su discurso, como sí hizo Xavi en sus años como entrenador culé.

Si las cosas no salen como uno desea, hay que centrarse en corregir los errores y mirar hacia adelante. Y Flick tiene muy claro que ese va a ser su plan a seguir. El alemán no va a escudarse en las excusas, porque sabe que no le llevan a ninguna parte y que debilitarían al vestuario. Para el exentrenador del Bayern no existe la excusa del césped, el sol, la falta de fichajes, los errores arbitrales o las lesiones.

Monaco - FC BarcelonaAFP

Y la gran diferencia respecto a Xavi es que si se ha perdido es porque las cosas se han hecho mal. En ningún momento, Flick dijo que habían sido merecedores de la victoria contra el Mónaco porque no fue así. El conjunto francés le sacó los colores al Barcelona y ganó justamente. No hay más. El técnico egarense hubiera dicho que la expulsión de Eric García había sido injusta.

«Nunca pienso en fichajes. Tenemos equipo y hemos demostrado en la Liga cómo podemos jugar de bien. Todos los equipos afrontan la misma realidad cada temporada, algunos partidos se pierden y los jugadores se lesionan. Como técnico hay que aceptarlo. Me centro en los jugadores disponibles para que den el cien por cien», afirmó Flick en la rueda de prensa previa al partido frente al Villarreal. Xavi hubiera dicho que su equipo estaba en construcción y que se habían merecido ganar.

El discurso de Flick es el de un entrenador que sabe lo que hay y por esa misma razón decidió fichar por el Barcelona. Roma no se construyó en un día. Hay que tener paciencia y si por una serie de factores no se puede tener todo, lo mejor es aceptar la realidad y cuando las cosas no salen bien asumir las consecuencias. Por esa razón, el partido ante el Villarreal se considera fundamental para comprobar si la derrota en Champions ha dolido al vestuario o no.

Flick lo tiene claro y cree que su equipo saldrá a por todas contra el conjunto groguet. «Lo analizamos todo, vimos aspectos positivos. Es cierto que perdimos, pero hay que seguir trabajando con la misma lógica y enfocar el partido de manera positiva. El Villarreal es el tercer equipo más goleador, son fuertes en defensa y hay que estar concentrados. Juegan muy bien, pero tendremos muchas opciones».