Fundado en 1910
Menú
Cerrar

El Atlético de Madrid no debe de cometer los mismos errores para poder optar a todoEFE

La historia de nunca acabar en el Atlético: los desafíos de Simeone para justificar la inversión del verano

El Atlético de Madrid venía de un par de temporadas sin apenas fichajes, algo que le obstaculizaba a la hora de intentar pelear por todos los títulos. Pero este verano las cosas cambiaron y el conjunto colchonero modificó su plan de actuación. Era algo necesario y que se llevaba demandando desde hace tiempo.

El conjunto colchonero hizo una inversión de 156,1 millones que respondía a la necesidad de volver a ser competitivo. Simeone lo había pedido y la junta directiva respondió con un total de cuatro incorporaciones de nivel. La joya de la corona fue la llegada del argentino Julián Álvarez. Y al delantero le acompañaron el central Robin Le Normand, el centrocampista Conor Gallagher y el también atacante Alexander Sorloth.

Sobre el papel, cuatro fichajes para pelear por todo. No valía otra cosa en el entorno del Atlético de Madrid. Se tenían que justificar de la mejor manera posible esos 156,1 millones de euros desembolsados en el mercado estival. A la directiva colchonera se le llegó a acusar de conservadurista y se afirmó que estaban más pendientes de cosas ajenas al club que del proyecto deportivo, lo realmente importante.

Hasta la fecha, el equipo del Cholo Simeone ha disputado un total de ocho partidos y el inicio no ha sido el que se había soñado cuando llegaron estos cuatro fichajes. Bien es cierto que el equipo colchonero ocupa la cuarta posición, pero el problema es que han vuelto a cometer los errores del pasado en dos de esos siete encuentros (también se empató frente al Villarreal, pero ese empate se entendía como normal). Y el ceder seis puntos en los primeros siete partidos de Liga es algo que ha hecho que el Atlético de Madrid se encuentre a seis puntos del liderato que marca el Barcelona.

El empatar contra rivales menos exigentes, como este caso han sido, con todos los respetos, el Espanyol y el Rayo Vallecano, le costó muchos puntos al conjunto colchonero y este año ya han desperdiciado partidos que sí o sí se tendrían que haber ganado por el nivel de plantilla con el que cuenta el Atlético de Madrid.

Rayo y Atlético se reparten los puntosEFE

El público es soberano y la realidad es que de los cuatro fichajes, Conor Gallagher ha sido el único capaz de demostrar su valía. El centrocampista inglés ha marcado dos goles y el resto no han sido del todo diferenciales. Para comprobarlo, hay que echar un vistazo a la tabla de goleadores. Julián Álvarez y Alexander Sorloth sólo han sido capaces de ver puerta dos veces y una respectivamente y todavía no han justificado si el Atlético hizo bien en gastarse dinero en ellos. Cabe recordar que el argentino y el noruego suman 107 millones de euros.

A lo que se agarra la afición rojiblanca es al proceso de adaptación de estos dos delanteros. Julián y Sorloth tienen gol y lo único justificable es que los inicios en los nuevos clubes suelen llevar un tiempo. Y para optar a todo, Simeone necesita que entren en juego lo antes posible y no tener que depender tanto de otros jugadores como Antoine Griezmann o Marcos Llorente, que han aparecido cuando el Atlético les ha necesitado.

Los objetivos del Atlético ya se conocen y Simeone apela al famoso 'partido a partido' que tan bien le ha ido desde que aterrizó en el club colchonero hace 12 años. Pensar a largo plazo no es la opción más recomendable. Las temporadas son muy largas y lo que debe de hacer el conjunto colchonero es vivir el día a día y no desesperarse. La liga es una carrera de fondo que la gana el que más paciencia tenga. La Champions es otro torneo importante en el que el Atlético debería acabar entre los ocho primeros para evitar ese play-in que les puede perjudicar en un mal día. Y la Copa del Rey es otra historia. A un solo partido puede pasar cualquier cosa.

En líneas generales, el Atlético de Madrid acaba de arrancar por así decirlo. Todavía no se pueden sacar demasiadas conclusiones. Es muy pronto. Pero en el club colchonero deben de saber que no pueden permitirse el lujo de caer en los mismos errores. Porque ya se ha visto en el pasado que esos tropiezos le han acabado perjudicando.