Khelif, boxeadora intergénero, arrolla a su rival y se asegura la medalla de bronce
La púgil argelina se ha impuesto por 5-0 a su rival, Lucca Anna Hamori y estará en la pelea por las medallas
La Organización Mundial de Boxeo advirtió al COI en 2022 que Khelif es biológicamente un hombre
La boxeadora argelina Imane Khelif se impuso ante húngara Lucca Anna Hamori por decisión unánime (5-0) en los cuartos de final de la categoría de 66 kilogramos en los Juegos Olímpicos de París 2024 y se asegura medalla.
Un combate que se disputó en medio de la polémica en torno a la argelina tras la retirada de su rival en cuartos, Angela Carini.
Como mínimo, Khelif tiene garantizado uno de los dos bronces que reparte el boxeo olímpico gracias a su rotundo triunfo frente a la húngara Anna Luca Hamori, decidido con unanimidad de los cinco jueces.
A diferencia de su controvertido primer combate, en el que su rival se retiró abruptamente y le negó el saludo, Khelif sí tuvo un breve abrazo con Hamori antes de celebrar el triunfo en llanto bajo los aplausos de una multitud de argelinos en las gradas.
Hamori llegó a recibir algunos abucheos al subir al ring del París Arena Norte después de que declarara que consideraba injusto tener que enfrentarse a Khelif. La argelina, que ya había competido en Tokio 2020 sin subir al podio, buscará un puesto en la final el martes frente a la tailandesa Janjaem Suwannapheng.
La participación en París de Khelif y de la taiwanesa Lin Yu Ting, que peleará el domingo en los cuartos de -57kg, ha generado un gran revuelo mediático y político después de que el año pasado fueran descalificadas del Mundial femenino por no superar una prueba de elegibilidad de género.
La polémica estalló el jueves cuando la italiana Angela Carini, primera oponente de Kheklif, abandonó entre lágrimas tras sólo 46 segundos de combate, en los que recibió varios fuertes golpes en el rostro.
Las imágenes de la pelea se extendieron rápidamente por las redes sociales con figuras del deporte, como Martina Navratilova, y de la política, desde la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, al expresidente estadounidense Donald Trump, criticando la autorización del COI a la participación de Khelif.