India 2-1 España
La España de hockey se estrella contra el muro de India y se va de París sin medalla
El equipo indio, bronce también en Tokio, remonta ante los RedSticks y les condenan a marcharse sin ningún metal a pesar de tumbar a los campeones en cuartos
España se va de vacío de París. Demasiado castigo para un equipo que tumbó a los campeones del mundo, Bélgica, pero que se achicó a la hora de la verdad. Ni antes Países Bajos en semis ni ahora contra India tuvo la contundencia que se necesita en la lucha por los metales de los Juegos Olímpicos.
El irse sin medalla no puede empañar el gran torneo que han hecho los RedSticks, pero duele caer a las puertas de colgarse alguno de los metales. Quizás el oro era muy ambicioso, pero el bronce era un objetivo asequible donde la falta de experiencia en estas fases pasó factura. India no fue mejor, pero sí más contundente. Empezó perdiendo, remontó y defendió con uñas y dientes su renta para imponerse por 2-1.
Se presentó al partido España sintiendo que tenía opciones. Es cierto que India se había llevado los últimos duelos ante los RedSticks, pero las sensaciones durante los Juegos Olímpicos eran de que el encuentro iba a ser de máxima igualdad. Dos conjuntos bien plantados, con sólidas defensas y a los que les cuesta materializar sus ocasiones.
España trató de llevar la iniciativa en el primer tiempo. Quiso la pelota y empezó a construir desde atrás, pero rápidamente vio que no iba a ser la mejor táctica. Los indios llegaban a la portería de Calzado en muy pocos toques, por lo que había que estar pendientes de los contragolpes. Así, con los equipos bien plantados y tanteándose se esfumó el primer tiempo. Pocas ocasiones y mucho miedo a empezar en desventaja.
España golpeó primero
El segundo acto fue de dominio indio. Los medallistas de bronce en los anteriores Juegos buscaban meter el primer zarpazo para revalidar su medalla, pero se encontraron justo con lo contrario. El primer tiro a puerta español en todo el partido y el primer ataque en ese cuarto terminó con un penalti stroke que convirtió con autoridad Marc Miralles.
Eso dejó noqueado por unos minutos a India y el propio Miralles se lanzó a la aventura en un contragolpe. No encontró el premio, pero instantes después recogió la pelota Joaquín Menini provocó dos penalti córner que quedaron en nada. Gran oportunidad desperdiciada e India aprovechó el perdón español.
A nada estuvo España de marcharse con ventaja al descanso, pero a falta de 20 segundos el capitán del equipo asiático, Harmanpreet, convirtió un penalti córner cometido por Pepe Cunill que pasó gran factura a los de Caldas. El primer objetivo estaba muy cerca y se había esfumado por un magnífico disparo del jugador más diferencial de India y un error evitable.
Si ya el final del segundo tiempo fue malo, el inicio del tercero fue dramático. España se quedó con la cabeza en el vestuario y otro penalti córner, también convertido por Harmanpreet, puso a los RedSticks en desventaja en apenas cuatro minutos. De la victoria se pasó a la derrota en un visto y no visto y la defensa india estaba muy bien plantada.
Muro infranqueable
A partir de ese momento, India se encargó de cerrar su área y los ataques españoles quedaban en nada. No había ideas y la ansiedad iba a más a medida que pasaban los minutos. Ni siquiera con los penaltis córner consiguió España igualar el choe. Otra vez más, como sucedió ante Países Bajos, falló todos los que tuvo. Dispuso de diez y ninguno entró, mientras que India marcó dos y fue suficiente para llevarse el bronce. España se va con el honor de haber tumbado a la favorita, pero eso no da medalla. Otra vez será.