Gareth Bale marcó el primer gol de Gales en un Mundial en 64 añosAFP

Gareth Bale y el Mundial que le encumbró como el símbolo más identitario de Gales

El exfutbolista del Real Madrid es más que un jugador en su selección, es el líder de un equipo que ha representado los valores identitarios de este territorio

Al micrófono, Dafydd Iwan, un cantante –y después político– galés, todo un icono en este país. A su lado, Gareth Bale, el deportista más mediático de la historia de una de las naciones del Reino Unidos. Gales acaba de clasificarse para el Mundial. La fiesta es histórica.

Esto, que ocurrió el pasado mes de junio, tiene ahora sentido en Qatar. Son muchas las historias que agrupa un Mundial de fútbol, pero la de Gales es especial. Este territorio, de apenas tres millones de habitantes, está en su segundo Mundial y en el final de su época dorada, aquella que ha ido de la mano de Gareth Bale, ya leyenda en su país.

Bale, una institución

Mucho se ha escrito y analizado sobre la actitud del exjugador del Real Madrid. Conocidas son sus 'borradas' en el Santiago Bernabéu, sus continuas lesiones y su poco interés en el club blanco en sus últimos años. Si uno ve lo que ha conseguido en Gales, lo entiende. Allí no hay duda: es más que un faro deportivo, es una institución.

De ahí que en el mes de junio, cuando Gales se jugaba llegar al Mundial, las lágrimas se repitieran en la grada del Cardiff City Stadium, el coqueto estadio en el que siempre juega la selección. Era mucho más que historia. Al ganar a Ucrania, Gales estaba en un Mundial. Es el primero en 64 años, el segundo en toda la historia.

En un país con enorme pasión por el rugby y el fútbol gaélico (un deporte que mezcla el fútbol con el rugby y que es toda una mezcla de sensaciones verlo), Gareth Bale ha conseguido obrar un milagro deportivo. No es que Gales haya pasado de la más absoluta irrelevancia futbolística, sino que le tiene en el primer plano mundial. Ahí están, con opciones de pasar a octavos, ronda a la que para llegar es clave el encuentro de este viernes ante Irán.

Gareth Bale se ha convertido en todo un icono nacional en GalesAFP

La imagen de Bale en España es la de un futbolista pasota que desperdició en los últimos años el gran nivel que tiene. Todo lo contrario es lo que se ve en Gales, donde Gareth es más que un simple deportista. Todo lo que no hizo en Madrid sí lo hacía en Cardiff y él ha conseguido no solo triunfar deportivamente, sino convertir a la selección galesa del fútbol –hasta 2016 olvidada por la sociedad– en un símbolo del país.

Hay que recordar que antes de la irrupción de Gareth Bale Gales era una selección que se acercaba más a los Liechtenstein, San Marino o Malta que a Dinamarca, Suecia o Suiza. Ni decir tiene ya el primer nivel europeo, que ni llegaba a mirarlo. Gales era irrelevante a nivel futbolístico, goleada en cada fase de clasificación. Una vez con Bale, la misma Gales ha jugado dos Eurocopas consecutivas –en una llegó a unas semifinales, mucho más que un éxito– y está ahora en un Mundial.

Icono nacional

Más allá del indudable triunfo deportivo existe una potente identidad que ha recuperado la selección de fútbol. Bale (y compañía) han conseguido que este equipo sea la imagen de la identidad galesa. De ahí esas lágrimas en la grada cuando se clasificaron al Mundial.

Antes y después de aquella gesta saltó al campo Dafydd Iwan, toda una estrella en su país. Es el autor de Yma o Hyd, una canción de la década de los 80 que es el himno oficioso del país. Es toda una exaltación patriótica de los galeses, una canción que reivindica el idioma galés y la supervivencia de su identidad.

Todavía estamos aquí, pese a todo y a todos ('Ry'n ni yma o hyd, er gwaetha pawb a phopeth') cantaban a todo pulmón –es parte de la letra– los galeses en una canción que una vez conseguidos grandes avances quedó prácticamente apartada en los últimos años. Se ha recuperado ahora con la selección de fútbol, la que mejor ha agrupado los valores identitarios de Gales.

Y al frente de todos ellos está Bale, que cantó una parte de la canción con el Cardiff City Stadium a sus pies. Gareth es también parte de la identidad galesa y es por ello que en Madrid era difícil entender que se centrara al 100 % en su selección. Pero es algo más para ellos que un simple Mundial. Es la reivindicación de su sentimiento en la que Bale se ha puesto a la cabeza.