Carlos Alcaraz, decidido a hacer historia: una nueva final de Grand Slam y confirmarse como el heredero

«Tengo Roland Garros entre ceja y ceja». Estas fueron las palabras de Carlos Alcaraz tras ganar el Mutua Madrid Open en el pasado mes de mayo. El murciano tenía muy claro cuál era su siguiente objetivo y está a tan solo dos partidos de levantar la Copa de los Mosqueteros por primera vez en su corta carrera. No obstante, estos dos encuentros supondrán un enorme desafío, ya que estarán llenos de dificultades.

Alcaraz está desplegando un tenis perfecto en París, espectacular en el apartado físico y sin ninguna fisura en su juego, destrozando la pelota con su derecha, cambiando ritmos con la dejada y sin dar ni una sola opción a los cinco rivales a los que se ha medido hasta ahora. Cobolli, Taro Daniel, Shapovalov, Musetti y Tsitsipas se han visto totalmente superados por el español, que es en estos momentos el jugador del momento.

Solo Taro Daniel, en segunda ronda, fue capaz de arañarle un set a Carlitos, que eso sí, ahora tendrá enfrente al que para muchos es el mejor tenista de la historia, Novak Djokovic. Este partido es la final anticipada y pondrá a prueba el nivel real del murciano, que hasta ahora no ha tenido un jugador como el serbio, quien va a pelear por cada punto y que además tiene en juego convertirse por primera vez en el jugador con más títulos de Grand Slam.

Por tanto, los logros que tiene cada uno por delante son enormes y se va a decidir todo en el que aspira a ser el choque de la temporada y seguramente uno de los mejores en toda la historia de Roland Garros. Cabe recordar que quien gane se convierte en número 1 y que además se enfrentarán dos estilos de tenis totalmente diferentes. Por un lado, la vieja escuela de Djokovic y, por el otro, la frescura de Alcaraz, una condición que embellece aún más el duelo.

Alcaraz, ya situado entre los mejores

Lo que está haciendo Carlos Alcaraz en París le ha colocado ya en el debate sobre si es uno de los mejores jugadores de la historia, no por su palmarés –que ya es envidiable–, sino por su forma de jugar al tenis. Muchos exjugadores coinciden en que nunca habían visto a alguien mostrar tal superioridad y jugar de manera tan bonita a este deporte, que ha encontrado en él al heredero de Federer, Nadal y Djokovic.

Sin embargo, el serbio no está dispuesto a ceder el testigo todavía y aunque su nivel en Roland Garros haya dejado dudas, lo cierto es que ha ido sacando adelante sus compromisos. Esto le ha llevado a una semifinal donde la experiencia será su principal baza y en la que buscará poner en complicaciones a Alcaraz desde el minuto uno, pues si algo no ha tenido el español en este torneo han sido apuros.

Esta será tan solo la segunda vez que se enfrenten (la primera fue en Madrid y ganó Alcaraz) y la mayoría coinciden en que el murciano será el favorito por el momento de forma que atraviesa y por su gran habilidad en tierra. No obstante, él no lo ve de esa manera.

«Siempre tomo de favorito a Nole, no es por tirar balones fuera o por quitarme presión, pero es el favorito. Tiene dos títulos aquí y si no tiene más es porque ha chocado contra el mejor de la historia en tierra batida, si no tendría más. Mientras esté Novak aquí, siempre va a ser el favorito», explicó al ser preguntado.

Por su parte Djokovic tuvo bonitas palabras hacia él y no entró a valorar quién era el favorito para vencer, eso sí, aseguró que le recordaba a Nadal. «Me recuerda a alguien zurdo de su país. Es un encuentro que mucha gente quiere ver. Será el mayor reto para mí hasta el momento en este torneo. Si quieres ser el mejor, tienes que ganar a los mejores», concluyó.