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Carlos Alcaraz, en la primera ronda del US Open 2023AFP

Alcaraz se estrena con una victoria descafeinada en el US Open por la retirada de su rival

Carlos Alcaraz saltó a la Arthur Ashe consciente de que haga lo que haga no saldrá de Nueva York como número 1. Novak Djokovic le arrebató esa posición al lograr un triunfo en la primera ronda del US Open, pero poco pareció importarle al murciano, que salió con todo para imponerse a Dominik Koepfer por la vía rápida en un partido que estuvo marcado por su lesión.

El alemán sintió unas molestias en su pie izquierdo nada más comenzar el choque y eso provocó que apenas tuviese historia. Carlitos no se distrajo con la lesión de su rival, visiblemente tocado y sin apenas poder moverse en pista, y se centró en hacer lo suyo para sacar adelante el encuentro cuanto antes y ahorrar fuerzas para lo que está por venir.

Con este escenario de partido, Alcaraz jugó sin pensar en la lesión de su oponente, tratando de moverle de lado a lado y de buscar sus fallos. El plan le salió a la perfección al murciano, que vio como el alemán se desesperaba e intentaba constantemente el golpe ganador para acortar los puntos y no tener que forzar en exceso. Sin embargo, consiguió lo contrario, pues se llenó de errores y con el paso de los minutos se le veía que sus molestias iban a más.

De esta manera, Carlitos se apuntó el primer set por 6-2 en poco más de media hora, donde además se incluye el tiempo médico de cinco minutos que solicitó Koepfer para intentar competir con garantías en el partido, algo que no consiguió y que le obligó a retirarse a mediados del segundo set.

Menos de una hora en pista

La segunda manga tuvo menos historia que la primera. Koepfer, número 75 del mundo, tiró por completo la toalla y comenzó a hacer cosas raras en pista para ver si lograba de alguna manera desconcentrar a Alcaraz, por lo que una vez que vio que eso no iba a ser posible y ya con break abajo también en este set, el alemán se acercó a la red para dar por finalizado el encuentro con solo 58 minutos jugados.

Esto permitirá al murciano llegar más fresco que el resto de sus rivales a la segunda ronda, pero será un arma de doble filo, ya que no ha tenido apenas tiempo para adaptarse a las difíciles condiciones de la pista central del US Open –la más grande en el mundo del tenis–. Por ello, Carlitos deberá prepararse bien para su siguiente compromiso, que será ante el cañonero Lloyd Harris, un tenista siempre incómodo.

Carlos Alcaraz y Dominik Koepfer se saludan en la redAFP

Por último, la retirada de Koepfer evidencia nuevamente el gran problema de lesiones que está teniendo el tenis en esta temporada. Lo cargado que está el calendario y lo exigente que es el ranking provoca que los jugadores tengan que encadenar muchas semanas de competición seguidas, lo que perjudica al espectáculo e invita a una reflexión sobre si es bueno para el tenis tener una temporada donde prácticamente no hay descanso.