Madres y tenistas profesionales: el circuito se llena de mujeres que buscan dedicarle un Grand Slam a sus hijos
El tenis femenino está viviendo en los últimos años el regreso de grandes campeonas que, tras su maternidad, buscan volver a ser competitivas
El deporte femenino ha cambiado mucho en los últimos años. Hasta hace poco era muy difícil ver a alguna profesional de cualquier disciplina volver a competir tras su maternidad. Había algunos casos, como el de Margaret Court en el tenis –que logró tres títulos de Grand Slam después de dar a luz–, pero la mayoría ponían el punto final a sus carreras al quedarse embarazadas.
Es por eso que muchas mujeres prefirieron no ser madres (o serlo muy tarde) para poder estirar al máximo su carrera, ya que retirarse no solo implicaba dejar de competir y de hacer lo que más amaban, sino que también podía provocar problemas económicos, pues no todas las deportistas ganan millonadas.
Ahora las cosas han cambiado y el tenis es una buena muestra de ello. En los últimos años, el circuito femenino se ha llenado de regresos de grandes campeonas que desean volver a su trabajo y recuperar la forma física que tenían antes de ser madres. Serena Williams y Victoria Azarenka (dos exnúmeros 1) fueron las primeras en hacerlo en los últimos años.
Ambas volvieron a competir y lo hicieron con muchas garantías, aunque ninguna logró su verdadero objetivo: volver a ganar un Grand Slam. No obstante, no se quedaron lejos, pues Serena alcanzó cuatro finales, mientras que la bielorrusa llegó a una final en el año 2020 y a las semifinales del Open de Australia de la pasada temporada. Además, cabe recordar que la menor de las Williams ganó en Melbourne, estando embarazada de ocho semanas.
Los regresos de ahora
Entre 2023 y 2024, cuatro jugadoras muy destacadas como son Naomi Osaka, Angelique Kerber, Caroline Wozniacki (dos hijos) y Elina Svitolina se han dado una nueva oportunidad en el circuito. Las tres primeras son campeonas de Grand Slam y exnúmeros 1, mientras que la última fue campeona de la Copa de Maestras, medallista olímpica y número 3 del mundo como mejor ranking.
La jugadora más destacada de todas es Kerber. La alemana de 35 años, que junto con Osaka ha sido la última en volver, fue la gran dominadora del tenis en 2016 y es considerada como una de las grandes luchadoras del circuito. Su tenis tan físico de devolver siempre una bola más y su calidad de zurda hace que en algunas cosas recuerde a Nadal. Ya que en un deporte en el que cada vez se utiliza más la fuerza, siempre es bonito ver como otros estilos también pueden triunfar
En cambio, la más popular es Osaka. Amada por todo Japón, la joven de 26 años regresa después de ser madre, pero también tras haber pasado por una depresión (previa a la maternidad). Fue durante un tiempo considerada la heredera de Serena, pero su excesivo activismo en causas como la de Black Lives Matter, la terminaron por descentrar del tenis. Por eso será interesante ver si vuelve más centrada ya que por tenis y edad es la candidata ideal para dedicarle un major a su hijo,
Wozniacki y Svitolina regresaron en 2023 y ya dejaron destellos de su gran calidad. Sin embargo, sus vueltas fueron sobre todo muy emotivas. En primer lugar, la de Wozniacki fue una gran sorpresa. La danesa de 33 años anunció que volvía a competir de repente, sin que nadie lo esperara pues se retiró en 2019 para formar una familia junto con el exjugador de la NBA, David Lee.
«Durante estos últimos tres años fuera del tenis pude recuperar el tiempo perdido con mi familia, me convertí en madre y ahora tengo dos hermosos hijos por los que estoy muy agradecida. Pero todavía tengo metas que quiero lograr. Quiero mostrarles a mis hijos que puedes perseguir tus sueños sin importar tu edad o tu rol. Decidimos como familia que era el momento», comentó para anunciar su regreso.
La historia de Svitolina
Finalmente, la vuelta de Svitolina fue una muestra de superación. La ucraniana, que ha seguido yendo a su país para ver a su familia, tuvo que hacer frente a la maternidad y a la guerra en su país. Además, derrotó en Wimbledon a la número 1 del mundo y se quedó muy cerca de llegar a la final. Está claro que no tiene el palmarés de las otras tres, pero a sus 29 años está en uno de los mejores momentos de su carrera y ha empezado el año haciendo final en el WTA de Auckland.
A esta lista de regresos pronto se unirán nuevas jugadoras. Belinda Bencic (oro olímpico) y Petra Kvitova (ganadora de Grand Slam) han anunciado que están embarazadas y que tienen en mente regresar tras la maternidad. Por tanto, queda claro que ser madre ya no es un impedimento ni un miedo y que con trabajo y colaboración de los organismos del deporte es posible recuperar el nivel y compaginar la maternidad con la carrera profesional.