Alcaraz suma y sigue en los Juegos Olímpicos y ya está en los octavos de final

Carlos Alcaraz es la esperanza olímpica de España en tenis tras la eliminación de Rafa Nadal ante Novak Djokovic esta mañana. El murciano ya es el presente del tenis y llegó a París como favorito al oro y sabiendo que en los pronósticos la suya era una medalla que se daba por segura. No es fácil lidiar con esa presión, pero de momento lo está haciendo con nota y en segunda ronda se ha impuesto a Tallon Griekspoor por 6-1 y 7-6(3).

Arrasó en el primer set y sufrió de lo lindo en el segundo. Era un partido trampa y se notó. El neerlandés tiene un estilo de tenis muy directo y cuando está enchufado puede ganar a cualquiera y así estuvo al final del encuentro. Arriesgando en cada golpe y conectando infinidad de ganadores. Aun así, el murciano se las apañó para mandarlo a la lona.

Nunca se pensó viendo el primer set que después Carlitos fuese a sufrir tanto. Pintaba a paliza tremenda con un Alcaraz haciendo disfrutar a la pista central de Roland Garros con su mejor tenis. Derechas increíbles, dejadas perfectas e inquebrantable al saque. Todo le funcionaba al murciano y en un visto y no visto ya se había metido al bolsillo la primera manga.

A algunos no les había dado tiempo ni siquiera a acomodarse y ya debían ir pensando en el próximo partido. Todo hacía indicar que Carlitos se iba a llevar el partido sin sufrir y en algo más de una hora de juego. Mejor para él y también para Nadal, que mañana volverá a saltar a pista para el dobles. Sin embargo, el neerlandés despertó a tiempo y tras su paso por vestuarios parecía otro. Lo que antes eran fallos ahora eran ganadores y orden en pista.

Grieskpoor hizo acto de presencia

Como hacen los grandes cuando las cosas no salen, el neerlandés se agarró a su servicio en busca de buenas sensaciones. Mucho saque y volea para acortar los puntos y esperar un cambio de guion que no llegó, pero cerca estuvo. Los saques se sucedían y no llegaba la rotura por parte de nadie hasta que Griekspoor encontró una bola de set que metió el miedo en el cuerpo a toda España.

Un partido que había estado tan controlado en todo momento no debía irse a la tercera manga y el español se vio obligado a sacar su mejor tenis. No quiso jugar al 100 %, pues tiene dos competiciones y debe guardar energías para las rondas finales, pero el final del segundo set le obligó emplearse al máximo para evitar jugar otros 45 minutos más.

No hubo ningún break y todo se resolvió en el desempate. Territorio Alcaraz. El español se ha convertido en un auténtico especialista de los momentos calientes y nuevamente volvió a caer a su favor. Eso sí, no sin otro susto en el cuerpo, ya que llegó a ir minibreak abajo y por momentos parecía estar más cerca un tercer set que la victoria del murciano.

Le dio lo mismo a Carlitos la impresión que tuviera la pista y cerró en dos. Nueva victoria para el tenis español y a solo dos triunfos de meterse en la lucha por las medallas. Ya queda menos y el beso de Alcaraz a la bandera de España deja claro que lo va a dar todo. Es su gran prioridad de este año.