Crisis
Los mineros del Bitcoin se plantean abandonar Kazajistán
El país centroasiático es la segunda potencia mundial en minería de criptomonedas tras Estados Unidos
Kazajistán es el noveno país más grande del mundo. Gran parte de su territorio pertenece a Asia y un porcentaje menor, a Europa. Sus fronteras con China y Rusia le ponen en el disparadero de problemas políticos que se han desatado a comienzos de 2022.
La subida del precio del combustible y el autoritarismo del gobierno ha convertido las calles de Almaty en una batalla campal que ha desembocado en una durísima represión con disparos que han acabado con la vida de cientos de personas.
Esta situación ha provocado cortes de suministro eléctrico y de internet. Y la caída del Bitcoin. Una relación de hechos poco conocida porque poca gente sabía hasta ahora que la segunda potencia de minería de criptomonedas por detrás de Estados Unidos (35 %) es Kazajistán (18 %) y luego está Rusia (11 %). Las leyes chinas contra la minería de activos digitales provocaron que casi 90.000 mineros cruzarán la frontera con sus superordenadores para extraer monedas digitales resolviendo fórmulas matemáticas de encriptación.
Desde junio de 2021 la demanda de la electricidad en Kazajistán se incrementó un 8 % lo que provocó que las plantas de carbón tuviesen que quemar más materia y doblar su tasa de contaminación. La operadora kazaja KEGOC cortó la electricidad de algunos mineros en octubre de 2021 y el gobierno no veía con buenos ojos que su plan para descarbonizar el país se encontrase con los mineros.
Más seguridad
Con las protestas de estos días, muchos propietarios de instalaciones mineras tuvieron que aumentar la seguridad porque sus equipos son caros y temen perderlos. El frío y las enormes naves que hay en la estepa kazaja fueron un importante reclamo hace un año para mudarse a minar a este territorio.
Ahora, los problemas energéticos han provocado que la cotización de Bitcoin caiga por debajo de los 40.000 dólares. La volatilidad de todas las criptodivisas se pone de en evidencia cuando este tipo de problemas sociales y políticos afectan al valor de una divisa que intenta colarse en el futuro de la economía mundial.
Latinoamérica
A la espera del futuro de Kazajistán, los mineros de criptomonedas ya miran hacia otros lugares para seguir con su proceso de creación de riqueza. El consumo energético tan elevado hace que no puedan localizarse en cualquier espacio y Latinoamérica es un emplazamiento que tiene políticas para atraer este negocio.
Las fuentes de energía hidroeléctrica de Paraguay han llevado a su gobierno a tener interés en explotar el negocio de la minería de bitcoins. También Argentina que, en medio de su permanente crisis económica, pretende levantar un centro minero.
El agua, el sol y el viento de El Salvador conseguirá en los próximos años que aumenten las llegadas de mineros gracias a su energía barata y 100 % renovable.