Bankinter pide al Gobierno «reformas estructurales» y no «subvenciones»

La consejera delegada de Bankinter, María Dolores Dancausa, ha pedido hoy al Gobierno que haga «reformas estructurales liberalizadoras» que «dinamicen la inversión productiva, estimulen el crecimiento y creen empleo».

Dichas medidas deberían incluir «un ajuste amplio del gasto no productivo», ha añadido, antes de asegurar que las medidas que está tomando el Gobierno (para reactivar la economía y solucionar crisis como la de los transportistas o los precios de la energía) son «claramente insuficientes» y, a su juicio, son «subvenciones».

Y ese dinero sale de unos impuestos que van a contribuir a elevar el déficit y la deuda y eso «no es la solución», ha añadido, en su intervención en el foro Wake up Spain!

También ha señalado que otras medidas como la indexación de las pensiones al IPC «van en dirección contraria» a la moderación salarial que se pide a las empresas, porque al final, si continúa esta situación, va a ser difícil que los sueldos no se indexen también al IPC.

La inflación es el «asesino silencioso» de la economía y del bienestar de las personas, puesto que destruye la confianza en la moneda y en el sistema económico y acaba con los ahorros de los ciudadanos, ha lamentado.

Sobre la ampliación de los créditos ICO con 10.000 millones más, ha dicho que es una «magnífica noticia», porque «es el momento de ayudar» y se ha mostrado convencida de que aportarán de nuevo liquidez y tranquilidad a las empresas.

En cuanto a la previsible subida de la morosidad que tendrá lugar cuando se acaben las garantías de estos créditos, ha dicho que no cree que sea de mucha envergadura, y mucho menos en Bankinter, que tiene un ratio «mucho menor» que el sistema (un 2,24 %) y se mantendrá ahí en el primer trimestre de 2022.

Más que la morosidad, lo que preocupa a Dancausa es que se garantice a las empresas «un escenario de estabilidad y seguridad» para que puedan recuperar el pulso económico y seguir adelante, por lo que es imprescindible lograr un consenso interno en España que permita tomar las medidas necesarias para seguir creciendo.

También ha insistido en que es necesario agilizar la aprobación y ejecución de los fondos europeos Next Generation y «eliminar las trabas burocráticas» que existen porque las empresas y la economía «los necesitan».

Por ello, ha pedido al Gobierno que utilice y aproveche la capilaridad de la banca y su conocimiento de clientes y empresas, así como su capacidad para adelantar esos fondos a las empresas que luego puedan resultar beneficiarias de los mismos.

En cuanto a la atención a los mayores, ha insistido en que no son solo ellos los afectados por el recorte de medios y de personal en oficinas y «call-centers» ni es solo en la banca, sino que la pandemia ha acelerado el cierre prematuro de los recursos presenciales en general.