Cómo afecta el Ingreso Mínimo Vital en la declaración de la Renta 2021–2022

La campaña de la renta finaliza el próximo 30 de junio, y las personas que reciben el Ingreso Mínimo Vital (IMV) deben tener especial precaución a la hora de realizar la declaración. Pese a que el IMV es una renta exenta de pagar impuestos, los beneficiarios tienen la obligación de presentar la declaración por IRPF, independientemente de la cuantía de sus ingresos.

La Agencia Tributaria recuerda que sí que deberán declararse -como rendimientos del trabajo- las cuantías que superen los 11.862,90 euros (1,5 veces el Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples). En el caso de que, junto al IMV, se perciban otras ayudas -a colectivos con riesgo de exclusión social como la renta mínima de inserción, rentas garantizadas y ayudas similares de CC.AA y ayuntamientos- solo se debe declarar, y tributar, por ese exceso.

Asimismo, en la gran mayoría de casos la declaración es muy sencilla, sin ingresos que incorporar. En muchas ocasiones -cuando no se haya obtenido ninguna otra renta- la cuota será cero, sin tener que ingresar ni devolver nada.