Crisis de los carburantes
El alza del petróleo pulveriza el ahorro de la bonificación a la gasolina en solo dos meses
El litro de gasolina 95 se vende a casi dos euros, 20 céntimos más que el 1 de abril, día en el que entró en vigor la bonificación del Gobierno. La medida –que ha costado 1.420 millones– podría prorrogarse
El Gobierno podría prorrogar la bonificación al litro de los carburantes más allá del 30 de junio. El Ejecutivo tan sólo cuenta con este mecanismo para controlar en parte el alza de la inflación, después de que Bruselas siga retrasando la aplicación del tope del gas. Una medida sobre la que Moncloa ha rebajado las expectativas. Según la ministra Teresa Ribera, tan solo rebajará entre un 20 y un 15 % el recibo de la luz.
Durante las últimas semanas, tanto el precio de la gasolina como del gasóleo se han desbocado. El 1 de abril –cuando entró en vigor la medida– el litro de gasolina 95 se vendía a una media de 1,81 euros, dos meses después el precio se ha elevado hasta rozar los dos euros. Un periodo en el que el efecto de la bonificación ha quedado diluido por el encarecimiento del carburante. La aplicación de la medida implica un descuento de 20 céntimos por litro de carburante.
La aplicación de la norma se ha convertido en un quebradero de cabeza desde el inicio. El conflicto entre el Gobierno y las estaciones de servicio ha sido constante. Desde Moncloa han acusado a varias gasolineras de inflar el precio, el sector –por su parte– ha criticado el retraso en el adelanto de los pagos por parte de Hacienda. Un malestar que se ha trasladado al consumidor, que durante los primeros días sufrió las consecuencias de la batalla entre las distribuidoras y el Ejecutivo.
Más de 1.420 millones en dos meses
El precio del Brent anticipa nuevos repuntes del precio de la gasolina y del gasoil durante las próximas semanas. El encarecimiento del petróleo podría seguir llevándose por delante el efecto de la bonificación del Gobierno, que exige un esfuerzo de 1.420 millones para las cuentas públicas, según los Técnicos de Hacienda.
Durante los últimos días, el Ejecutivo ha abierto la puerta a prorrogar la medida. La pasada semana, la ministra de Transportes, Raquel Sánchez, se mostró a favor de ampliar el plazo de la bonificación «si fuera necesario». En una entrevista concedida a ‘Radio Club Tenerife’, la también titular de Movilidad y Agenda Urbana confirmó que el Consejo de Ministros está valorando esta posibilidad. En caso de llevarse a cabo, el impacto en el gasto público sería mayor al esperado, pero su efecto menor al proyectado hace semanas.
El Brent seguirá subiendo
Varios factores adelantan un encarecimiento futuro del crudo. El posible veto europeo al petróleo ruso, la negativa de la OPEP a elevar la producción y la reapertura de China –tras semanas confinada por el rebrote de la COVID–, podrían seguir disparando el precio del barril de Brent.
El despertar de la demanda en el gigante asiático –tras un nuevo parón de actividad– podría generar tensiones en el mercado, empujando al alza las cifras que anuncian el precio/litro en los paneles de las gasolineras españolas.
Su vuelta al mercado aumentaría la demanda y «haría al Brent posicionarse en cotas de alrededor de 120 dólares», según proyectó Antonio Aceituno, Ceo de Tempos Energía en declaraciones a El Debate.
Un 38 % del precio total del litro de carburante procede del coste al por mayor, influido por el precio al que las petroleras compran el crudo que procesan para convertirlo en gasolina o gasoil. El encarecimiento del Brent tarda en trasladarse al consumidor final, ya que las empresas necesitan tiempo para tratar el crudo.